El perfil de la persona denunciada por malos tratos en la región responde a un hombre cada vez más joven, de entre 25 y 45 años, con mejor formación académica y con una situación laboral estable. Así aparece reflejado en la Memoria de Actuaciones en materia de Violencia de Género del año 2002.

El estudio refleja que el 78% de los malos tratos se producen en el domicilio familiar, la mayor parte de ellos (22%) tras una discusión sobre la separación o por motivos relacionados con la vida cotidiana (21%), tales como la educación de los hijos o la comida, mientras que las disputas por cuestiones económicas suponen el 7% de las agresiones. Sin embargo, en ninguna de estas situaciones "hay una situación convincente para que se ejerza la violencia", indicó ayer la presidenta de Malvaluna, Catalina Galán, en declaraciones recogidas por la agencia Europa Press.

En la memoria también se pone de manifiesto que en la mitad de las denuncias, pasan más de seis meses desde que se lleva a los tribunales hasta que se celebra el juicio, aunque una vez iniciado, en el 91% de los casos de faltas por malos tratos se condena al agresor; mientras que las resoluciones en juicios por agresiones, abusos y acoso sexual fueron condenatorias en la totalidad de los casos denunciados.

ACTUACIONES

El informe se ha realizado a partir de los casos atendidos por Malvaluna el pasado año. En total la asociación atendió a 355 mujeres; de ellas, casi la mitad tenía entre 18 y 40 años de edad, un 11% eran menores de edad, y el resto mayores de 41 años, y la mayoría contaba con estudios primarios.

Además, prestó asistencia en 590 ocasiones, sobre todo para consultas jurídicas y psicológicas, y colaboró en la tramitación de 153 actuaciones judiciales.