Manuel Cupido, Manuel Magallanes y Eloy de la Era fueron compañeros de trabajo en la Fundación ONCE y tras jubilarse lo son en las aulas del segundo curso de la Universidad de Mayores en Badajoz. La motivación impulsa a estos hombres cuyas edades oscilan entre los 56 y 59 años. "Quería pasar el tiempo de forma positiva, aprender cosas nuevas y conocer a gente. Esta es una buena opción para cubrir ese tiempo vacío que tenemos cuando dejamos de trabajar", comenta Magallanes.

La invidencia que padecen dos de estos alumnos no es obstáculo para su formación. "Tenemos programas de voz y podemos acceder a internet con relativa facilidad. El seguimiento de las clases es igual que para cualquier otra persona y además podemos grabar las clases", comentan.