El sector servicios tiró del desempleo en marzo y dejó 1.950 parados menos en Extremadura, lo que supone un descenso de un 1,73% respecto al mes de febrero. Así, el Ministerio de Empleo y Seguridad Social registra en la actualidad un total de 110.989 extremeños desempleados inscritos en las oficinas del Sexpe. Estos últimos datos difundidos ayer suponen un descenso de más de 8.300 desempleados (un 7% menos) respecto a marzo de 2017, cuando el total de parados estaba muy cerca de los 120.000. La afiliación a la Seguridad Social registró un incremento del 0,02%, apenas 98 cotizantes más, hasta los 380.585 ocupados.
El descenso del paro experimentado fue el más bajo de un mes de marzo en los últimos cuatro años y se produjo gracias al sector servicios, que contabilizó 2.273 desempleados menos que el mes anterior. El tirón de la Semana Santa tuvo mucho que ver. La agricultura también registró menos parados (104), sin embargo las listas del paro crecieron en el resto de sectores: industria (35 desempleados más), construcción (353 más) y en el colectivo sin empleo anterior (con 39 más).
Respecto a las provincias, el paro bajó en Badajoz en 1.027 personas, un 1,39% menos en relación a febrero, lo que sitúa en 72.942 el número de desempleados, mientras que en Cáceres descendió en 923 personas, un porcentaje del 2,37% que cifra el número de parados en 38.047 personas. Por sexos, el paro masculino se situó a finales del mes pasado en 45.351 personas y el femenino en 65.638, ambos experimentaron un descenso respecto a febrero. En cuanto a los menores de 25 años, suman 11.775 parados, de los cuales 6.053 son hombres y 5.722 son mujeres.
temporalidad / Por su parte, durante el mes pasado se firmaron en Extremadura 38.802 contratos. En términos absolutos son una decena menos que durante febrero pero crece un 34% la contratación indefinida respecto al mes anterior. No obstante, los 2.369 contratos de carácter indefinido registrados sólo representan el 6,1% del total, frente a los más de 36.400 temporales.
En el conjunto del país, el desempleo cayó el 1,37% y 47.697 parados menos en marzo y dejó la cifra de desempleados en 3.422.551. El paro bajó en marzo en 16 de las 17 comunidades, especialmente en Baleares, con un descenso del 9,51%, y Cantabria (4,13% menos) y solo subió en Castilla-La Mancha, un 0,16%.En términos generales los datos de muestran una ralentización de la mejora del mercado laboral y confirman, un mes más, su dependencia de la actividad económica de temporada.
Con estos indicadores publicados ayer, el sindicato CCOO señaló que el mes de marzo ha defraudado las expectativas en creación de empleo, puesto que la Semana Santa. De hecho, la central sindical apuntó que el descenso del paro en este mes a un ritmo «muy por debajo del que se registró en 2017», cuando se redujo en casi 3.500 personas. Asimismo, dijo que el ligero incremento de la afiliación a la Seguridad Social muestra «el poco dinamismo» del mercado de trabajo extremeño.
PLAN DE CHOQUE / En este marco, desde la Confederación Empresarial Extremeña, su secretario general, Javier Peinado, precisó que los datos «no son malos», pero el «escaso» incremento en cuanto a la afiliación a la Seguridad Social hace necesario un cambio en el modelo productivo que atraiga inversión. La patronal insistió en la necesidad de un «plan de choque» en infraestructuras y de mejoras en las condiciones fiscales y en las cargas burocráticas, pues sin ellas la diferencia competitiva con otros territorios hace «muy difícil» atraer nuevas inversiones y actividades productivas.
Para UGT el empleo que se crea es «totalmente inestable y sin perspectivas de futuro». En opinión de su secretario de Empleo, Teodoro Casares, a los problemas citados se suma «una temporalidad asentada fuertemente en el mercado laboral» y «un empleo precario camuflado como indefinido». Por ello, propone impulsar un plan de choque y la puesta en marcha del nuevo contrato de relevo que permita a los trabajadores de más edad llegar en condiciones a su jubilación y facilitarles el empleo a los jóvenes.
Por su parte, el secretario general de Empleo de la Junta, Javier Luna, aseguró que la consolidación del ritmo de reducción del desempleo es fruto de «la mejora de las expectativas económicas» y de unas políticas activas de empleo «orientadas hacia la actividad económica». En su opinión, esta tendencia continuará en la segunda fase del Plan de Empleo, para lo que ha pedido que los Presupuestos Generales del Estado consignen «un esfuerzo adicional» para comunidades que necesitan «romper el techo de cristal del paro».
