Más de un millar de extremeños han solicitado ya las ayudas de la Ley de Dependencia, de las que, según lo previsto, este año pueden beneficiarse los "grandes dependientes". Según la estimación de la Junta de Extremadura, 6.700 personas presentan esta condición en la región, de las que 1.209, de acuerdo con los datos facilitados por la Consejería de Bienestar Social, ya han cursado las solicitudes para acceder a estas ayudas.

En concreto, la cifra corresponde a las instancias que, a principios de junio, habían llegado a la sede central de la Consejería en Mérida --se tramitan, aparte de allí, en sus dependencias de Badajoz y Cáceres y en los ayuntamientos--, por lo que su número podría ser aún superior, según aclaran las fuentes consultadas. Lo que está por determinar es si los solicitantes se encuadran en la categoría de "grandes dependientes" (aquellos que presentan el mayor nivel de dependencia --"grado tres"--, al necesitar ayuda todo el día), ya que eso depende de la evaluación de los equipos de Bienestar Social, que pretenden abordar esta tarea a partir del próximo mes.

EVALUACION Este es el siguiente paso, después de la solicitud, del proceso para obtener el reconocimiento de la situación de dependencia y la consecución de la correspondiente ayuda. De hecho, de acuerdo con la información facilitada por la consejería, ya se han formado una veintena de equipos de cuatro profesionales --trabajadores sociales y terapeutas ocupacionales-- cuya labor consistirá en visitar a los demandantes en sus domicilios con objeto de evaluar su grado de dependencia.

En este sentido, aclaran las mismas fuentes, se ha aconsejado a los solicitantes que no inicien el proceso si no consideran que van a alcanzar el "grado tres" de dependencia. "No hay un plazo límite para pedir las ayudas, porque se van a ir concediendo de forma progresiva --de mayor a menor nivel de dependencia, hasta el año 2015, cuando se pretende completar la cobertura que prevé la nueva ley--. Por eso, no tiene sentido solicitar la evaluación ahora, si aún no se va a poder acceder a la prestación correspondiente".

Una prestación que reconocerá la labor de las personas que se ocupan de la atención de familiares dependientes. Podrán recibir un sueldo de 487 euros y estarán amparados por la Seguridad Social.