El que fuera director general de la UNESCO y que actualmente preside la Fundación Cultura y Paz, Federico Mayor Zaragoza, pide en Almendralejo durante la conmemoración del 60 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos que los ciudadanos se impliquen en el cumplimiento de los mismos.Mayor Zaragoza ha impartido una charla-coloquio titulada La declaración Universal de los Derechos Humanos y la Cultura de la Paz en el siglo XXI, a la que asisten un centenar de personas en el Centro Cívico de Almendralejo y a través de videoconferencia por las responsables de la Casa de la Mujer, en apoyo a la candidatura de Cáceres 2016 y del aniversario, informa Efe.En el acto han estado presentes el presidente de la Asamblea de Extremadura, Juan Ramón Ferreira; el consejero de los Jóvenes y el Deporte, Carlos Javier Rodríguez; el alcalde de Almendralejo, José María Ramírez; el presidente de la Fundación Ciudadanía, José María Rodríguez Guzmán; el presidente de Cajalmendralejo, Sebastián Moreno Guerrero; y la presidenta de la Asociación de Derechos Humanos de Extremadura, Flor Fondón Salomón. Mayor Zaragoza aboga por el buen uso de las nuevas tecnologías para que los ciudadanos se expresen porque "debe haber un cambio radical en la democracia y se puede hacer utilizando los sms de móviles o internet, que permiten expresarnos de forma no presencial". El expresidente de la UNESCO manifiesta que estas herramientas, como el conocimiento, son una arma de doble filo, y que por tanto hay que darles un buen uso. "En la UNESCO vi las imágenes de unos niños y pensé que quienes consumen esto son personas enfermas a las que hay que tratar; pero quienes lo producen deben ir a la cárcel y ser castigados con firmeza", declara. Federico Mayor Zaragoza se refiere también al papel de los medios de comunicación en la sociedad actual, y les anima a ser "críticos" y a denunciar cuando algún derecho se vea vulnerado. De la misma forma critica a aquellos que no venden contenidos acordes con las edades. "Hay programas de audiencia infantil en los que no se escuchan más que palabrotas fuera de lugar", indica. Por ello anima a los ciudadanos a "utilizar el poder que tenemos, porque no lo hacemos", y añade que "necesitamos la implicación ciudadana para pasar de la guerra, a lo que siempre hemos querido, la paz".