La noticia de que la Compañía de las Hermanas de la Cruz recibirá la Medalla de Extremadura por acuerdo del Consejo de Gobierno ha sido muy bien acogida en Villafranca de los Barros. Y es que desde el año 1890, en que la creadora de la compañía, la ya canonizada santa Angela de la Cruz, fundase la casa en esta localidad pacense, han sido muchas las familias que han recibido los servicios de estas monjas, bien en el mundo de la educación, o bien en la atención a los enfermos y más necesitados.

La concesión se conoció el pasado viernes tras la reunión del Consejo de Gobierno de la Junta, en la que se hicieron públicos los nombres de las diez personas o instituciones a las que este año se distinguirá con el máximo reconocimiento que concede la comunidad autónoma.

En Villafranca vive una comunidad reducida de poco más de un decena de hermanas, cuya dedicación pasa por la educación en el colegio concertado ´La Inmaculada y San Ignacio´, donde cursan sus estudios niñas de la localidad en educación Infantil y Primaria. Además, el paso rápido de una pareja de monjas vestidas con sus hábitos marrones y sus zapatillas de esparto, cabizbajas y silenciosas, forma parte del paisaje villafranqués desde hace muchos años.

Las Hermanas de la Cruz atienden a numerosos enfermos a diario, pasando incluso noches enteras en su compañía y velándolos en su enfermedad. Sin olvidar la ayuda que, en forma de alimentos, ropas-, ofrecen a familias necesitadas que pasan habitualmente por el convento ubicado en pleno centro del municipio.

Y como prueba del cariño que sienten los villafranqueses hacia la fundadora de la Compañía de las Hermanas de la Cruz y fundadora, asimismo, del convento de esta orden en Villafranca, la localidad cuenta desde hace dos meses con una estatua de santa Angela con una cruz en las manos, ubicado en la plaza de Extremadura, próxima al convento.

La escultura fue realizada en bronce por encargo del consistorio y es obra del artista extremeño Ricardo García Lozano, quien explicó que "se ha intentado captar de manera especial la edad para que sea cercana a todos, además procuro idealizar un poco la imagen para dar esa idea de santidad, porque un santo es algo más que humano". "La pátina que tiene ahora --añadió-- es circunstancial y el tiempo le dará otra pátina, se dulcificará su expresión poco a poco".