La memoria del brutal atentado que sacudió España el 11 de marzo del 2004, el mayor de la historia de este país, inundará mañana Extremadura. Sindicatos, empresarios y ayuntamientos ya han anunciado que secundarán concentraciones silenciosas de cinco minutos a las doce de la mañana, mientras que Cáceres y Plasencia acogerán sendas misas en recuerdo a las víctimas de la masacre madrileña. En el caso de Cáceres será a las doce y cuarto en la concatedral, y en Plasencia será a las ocho de la tarde en la catedral.

La Federación de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex) ha pedido a todos los ayuntamientos de la región que convoquen a la ciudadanía extremeña a realizar concentraciones silenciosas de cinco minutos, en la puerta de los ayuntamientos, en recuerdo a las 192 víctimas mortales del atentado. De esta manera, la Fempex quiere mostrar "la solidaridad del pueblo extremeño con las víctimas de los brutales atentados de Madrid".

De momento, los ayuntamientos de Mérida y Don Benito ya han anunciado que se sumarán a este día de luto nacional con sus propios homenajes silenciosos, y es previsible que a lo largo del día lo hagan algunos más.

Desde los sindicatos, tanto UGT como Comisiones Obreras han realizado un llamamiento a los trabajadores para que a mediodía secunden el paro de cinco minutos que se ha convocado en toda la región.

Apoyo empresarial

Los empresarios no son ajenos a este movimiento solidario. La Confederación de Organizaciones Empresariales de la provincia de Badajoz (Coeba) y la Federación Empresarial de Cáceres (FEC) han solicitado a las empresas que, "en la medida de lo posible y desde la estricta voluntariedad", faciliten a los trabajadores que así lo deseen el seguimiento de esta acción conmemorativa.

Mientras, la Federación Territorial Extremeña de Fútbol ha acordado aplazar la Gala del Deporte Extremeño, que se iba a celebrar mañana.

Por otra parte, el Sindicato Unificado de Policía (SUP) pidió que en un día tan especial no se olvide a las cerca de 1.000 víctimas de atentados terroristas que había en España antes del 11-M.