Tercera huelga en la educación contra los recortes y la reforma del ministro Wert y tercera respuesta masiva en la calle en Extremadura. Alumnos, profesores y padres de todas las etapas volvieron a manifestarse ayer en la principales ciudades de la región para rechazar los recortes educativos, la Lomce (Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Docente) y los sendos decretos de becas aprobados por el gobierno central y autonómico.
En los centros, padres y alumnos tiraron de la jornada, mientras que hubo más diversidad en la calle. Fueron miles los extremeños que, desafiando a la lluvia, secundaron las manifestaciones que se desarrollaron por la tarde en las principales ciudades de la región. En torno a 18.000, cifran los convocantes.
Por la mañana, los estudiantes, que cumplieron tres días sin asistir a clase, volvieron ayer a secundar el paro entre un 75% y 95% desde Primaria, Secundaria y Bachillerato, siendo las últimas etapas la que registraron una mayor incidencia. En cuanto a los docentes, los sindicatos estiman que secundaron la huelga en torno al 50%. Y lo cierto es que muchas aulas se quedaron completamente vacías, especialmente de ESO. Sin embargo estos datos no coinciden con los aportados por la Administración educativa que cifró en apenas el 19,48% el seguimiento general a la huelga del personas que desempeña su labor en los centros educativos públicos. Respecto a los alumnos, la consejería señaló una incidencia "notable" en Secundaria, superando el 50% en general.
LA CONCERTADA, TAMBIEN A la jornada reivindicativa se unió ayer por primera vez la enseñanza concertada, aunque sin apenas respuesta. Apenas el 5% de los profesores faltaron a clase, según el presidente de USO, Guillermo Sanabria, y entre los alumnos la respuesta fue poco mayor con diferencias entre los centros. En la Universidad de Extremadura, fueron los estudiantes los que volvieron a encabezar la reivindicación no acudiendo a clase un 60% de universitarios frente a apenas el 1% de los profesores.
Esta tercera huelga sectorial a la que se enfrenta el ministro José Ignacio Wert se desarrolló con normalidad y "sin incidencias notables", destacó el secretario general de Educación, César Díez Solís. La policía solo intervino en el arresto de cinco personas, C.S.C., J.D.T., J.C.D., F.M.G.D. y R.A.M.R, --entre ellos un militante de IU y un periodista, según EFE, lo cual fue criticado por las asociaciones de prensa de la región ya que se obvia la profesión del resto de detenidos-- a primera hora de la mañana de ayer que se disponían a sellar las entradas de quince colegios de Mérida y que quedaron en libertad con cargos tras prestar declaración.
Los convocantes destacaron también la normalidad de la jornada de huelga y se mostraron confiados en que esta nueva movilización de un giro a la política educativa del Gobierno. La convocatoria de huelga, presentada por la Plataforma por la Educación Pública --CCOO, UGT, STE-EX, FREAPA-CP, Apevex y Sindicato de Estudiantes-- y apoyada por PIDE, ANPE, CSIF, Adecex USO, Consejo de Estudiantes de la Uex, Coordinadora de Estudiantes de Extremadura y las asambleas universitarias, concluyó con manifestaciones en las principales ciudades extremeñas. En estas acciones los sindicatos exigieron un cambio de dirección en la política.
EL FUTURO El líder de CCOO, Julián Carretero, insistió en la necesidad de llegar a un consenso ante cualquier reforma educativa y exigió que los presupuestos regionales del 2014, en pleno debate, atiendan la respuesta de la comunidad y dejen de recortar en gasto educativo el próximo año. "Extremadura necesita futuro y la educación es futuro, depende de Monago y de los partidos que le apoyan el progreso de la región", dijo en Cáceres.
Francisco Capilla, secretario de UGT, destacó que la nueva ley, que ahora está en el Senado para su debate, retrotraerá el sistema educativo al primer cuarto del siglo XX y acusó al presidente extremeño de trasladar el contenido de esta reforma en los presupuestos extremeños, lo que provocará que "algún centro no pueda abrir sus puertas algún día".
En la misma línea se expresaron el resto de colectivos. Para PIDE la ausencia de voces discordantes fuera de los líderes del Gobierno evidencia el rechazo social a la política educativa actual. ANPE señaló que los docentes se sienten profundamente descontentos y frustrados por la situación del sistema y por eso alzaron su voz ayer masivamente, pese a la pérdida económica que supone una huelga, a la que se suman los recortes y congelaciones acumuladas en el salario. La asociación de docentes de la concertada, Adecex, aseguró que la incidencia en todo el sector pone de relieve que el PP "se ha quedado solo" en su defensa durante el trámite en el Congreso de los Diputados. Advierten, si no hay cambio, seguirán luchando.
