Pese al endurecimiento de las sanciones y las fatales consecuencias que puede tener, muchos extremeños siguen poniéndose al volante tras haber consumido bebidas alcohólicas. De hecho, más de un millar de conductores dan positivo cada año en la región en los controles que realiza la Guardia Civil --a estos habría que sumar los datos de la policía local--. Por este motivo la Dirección General de Tráfico (DGT) va a llevar a cabo entre los días 7 y 20 de diciembre una nueva campaña de pruebas de alcoholemia en las carreteras de la comunidad autónoma.

Durante este dispositivo especial, que comienza el lunes, Tráfico prevé realizar más de 200 controles y practicar alcoholemias a cerca de 6.000 conductores. El objetivo es evitar el consumo de alcohol por parte de los conductores, especialmente en estas semanas en las que son muy habituales las celebraciones de empresa y de amigos para celebrar la navidad. Con ello, la administración confía en reducir la cifra de accidentes de circulación: cada año se producen en España unos 50.000 siniestros relacionados con la ingesta de bebidas alcohólicas.

Tráfico ya realizó una campaña similar hace un año. Entonces se realizaron 122 controles y 6.658 pruebas a conductores en la región. De ellos, 70 superaron los límites máximos de alcohol en sangre permitidos por la legislación: 43 fueron sancionados solo administrativamente y 27 --los casos más graves-- fueron detenidos y puestos a disposición judicial.

En diciembre del 2007 entró en vigor la reforma del Código Penal, por la que se considera delito conducir con una tasa superior a 1,2 gramos por litro de alcohol en sangre y se establecen condenas de tres a seis meses de cárcel y de uno a cuatro años de privación del permiso. Desde entonces han sido detenidos en Extremadura 1.601 conductores. Además, se han tramitado 6.168 denuncias y se han retirado más de 200.000 puntos del carnet de conducir --una tasa superior a 0,5 (0,3 para conductores profesionales y noveles) conlleva una sanción de hasta 600 euros, suspensión del carnet hasta tres meses y perder entre cuatro y seis puntos del permiso--.

MAS CONTROL, MENOS CASOS Pero la Guardia Civil de Tráfico realiza pruebas de alcoholemia durante todo el año. De acuerdo con los datos facilitados ayer, hasta el 30 de noviembre, ha practicado 100.965 alcoholemias en Extremadura, casi 600 más que en todo el 2008 y 23.000 más que en el 2007. Pese a este aumento significativo de la vigilancia, el número de casos de conductores que superan los límites legales se ha reducido: de los 1.669 positivos del 2006 se ha pasado a 1.531 en el 2007, 1.508 durante el año pasado y 1.460 en lo que va de este 2009.