El presidente del Gobierno extremeño, José Antonio Monago, señaló ayer que el informe de Eurostat publicado ayer por este diario es "la foto del día", pero la tendencia es que en Extremadura "se está creando empleo" en el último interanual y que el paro juvenil está a "solo" ocho décimas de la media nacional, por lo que "hay luces de esperanza".
A preguntas de los periodistas, Monago se refería así a los últimos datos publicados por la oficina estadística comunitaria, según los cuales, Andalucía, Ceuta, Melilla, Canarias y Extremadura son las regiones con mayor desempleo de la Unión Europea, con una tasa en torno al 35%, tres veces por encima de la media en los Veintiocho.
El jefe del Ejecutivo regional destacó que resolver el "principal problema" que tenía y tiene Extremadura, que es el paro, es precisamente el reto y el compromiso que tienen los extremeños por parte de su equipo de gobierno.
En este sentido, indicó que enfrentarse a este problema ha necesitado de "mucho esfuerzo" por parte del Gobierno autonómico para cambiar un modelo económico "que estaba asentado en esta tierra pero que lo único que hacía era profundizar en los problemas".
Así, defendió que su gabinete ha hecho lo que tenía que hacer, como es ajustar las cuentas públicas, reducir el déficit y acometer reformas en la región. "Y la principal reforma y más difícil, destinada a resolver el problema que tenía y tiene Extremadura, ha sido cambiar la mentalidad y pasar de un modelo donde el dinero público lo resuelve todo a un modelo donde el protagonismo lo tiene lo que realmente genera estabilidad y futuro", indicó.
Monago subrayó que una solución basada en el empleo público tiene fecha de caducidad de ahí la necesidad de cambiar el modelo. "Y Extremadura, hoy por hoy y aunque a algunos les pese, tiene una imagen fuera de seriedad y responsabilidad, con el menor déficit de toda España, con las cuentas equilibradas y que hace una apuesta como no hace nadie en España por quien tiene que ser protagonista de esta nueva Extremadura que estamos construyendo", afirmó en su alocución.
El presidente extremeño puso de manifiesto que, a su juicio, "no hay ningún modelo de éxito que esté basado en la desesperanza y las malas noticias", y añadió que aquellos que sólo hablan mal de Extremadura "al final sucumbirán como un elemento más del fracaso".
Finalmente, señaló que él no trata de decir a nadie lo que no es la realidad, "pero que aquí hay gente trabajando y haciendo cosas, y que están saliendo algunas razonablemente bien, no lo puede ocultar nadie".
