Leve intento de cambio de guión, sin éxito. El presidente del PP de Extremadura, José Antonio Monago, propuso ayer pactar los presupuestos para hacer frente a la crisis económica y de forma similar a los acuerdos que se han alcanzado en temas como el Estatuto, pero la enmienda a la totalidad de la ley de presupuestos para el 2010 fue rechazada por los socialistas que consideraron, con la Junta al frente, que la sugerencia de los populares llega "tarde". Así lo aseguró el encargado de defender en la Asamblea las cuentas públicas de la región, el consejero de Administración Pública y Hacienda, Angel Franco, quien ya las presentó públicamente el pasado 15 de octubre, cuando explicó que el montante total asciende a 5.560 millones de euros, un 2,6% menos que el año anterior.

Hablando "en extremeño", según sus palabras, Monago aseguró que los presupuestos de Extremadura para el próximo año son como "un toro que está bizco y que está cojo" y que, por tanto, "no admite un pase", por lo que a su juicio "lo mejor que se puede hacer antes de perder el tiempo con estos presupuestos es devolverlo al corral". Tras criticar que se califiquen como sociales por incrementar las partidas de este tipo, argumentó que eso se debe a que "cada vez hay más necesitados y más pobres en Extremadura", cuando, a su juicio, "no hay nada más antisocial que tener la tasa de paro que tenemos en Extremadura".

En esta línea, el líder del PP aseguró que "estos presupuestos no sirven ni para salir de la crisis, ni para generar empleo", por lo que aseguró que "nunca una enmienda a la totalidad estuvo tan justificada como hoy". Pero además de pedir su retirada para elaborarlos de nuevo, quiso introducir una novedad comprometiéndose, en nombre de su grupo, a "sentarse para hablar de los presupuestos y mejorarlos".

Sin embargo, para el consejero de Administración Pública y Hacienda la oferta no es nueva --recordó que Floriano ya hizo una similar hace tres años, a cambio de que se bajaran los impuestos en 100 millones de euros a las familias-- y, sobre todo, llega tarde. "Nos hubiera gustado que es ofrecimiento lo hubiese hecho antes", afirmó recordando que la Junta lleva trabajando en la elaboración de las cuentas para el 2010 desde abril.

Asimismo, consideró que se trata de un "ofrecimiento envenenado" por esconder la pretensión de una bajada de impuestos que, según Franco, se correspondería con la ideología liberal del PP, pero impediría mantener las prestaciones sociales. En cambio, Monago recordó que otros países, como Alemania o Francia, están reduciendo los tributos pese a la crisis y rechazó las subidas que el Estado español va a aplicar, por considerar que frenarán aun más el consumo.