Igual que González y este humilde presidente se ponen de acuerdo para vender Extremadura, no entiendo que el PP y el PSOE no se pongan de acuerdo para vender España". El presidente extremeño, José Antonio Monago, defendió como un símbolo la visita a Badajoz del expresidente del Gobierno, Felipe González, para participar en un foro sobre inversión en la región como "un símbolo para España" de la "unión entre diferentes", en el que ambos aprovecharon para solicitar un gran acuerdo nacional por el empleo, al estilo de los Pactos de la Moncloa. Además, el dirigente extremeño confirmó la próxima bajada de impuestos en la región, justo el mismo día que Mariano Rajoy afirmó que no es posible tomar esta medida a nivel nacional.

Para afrontar esa crisis tras la que Rajoy se parapetó ayer para rechazar la reducción de tributos que le reclamaba en Madrid Esperanza Aguirre, Monago insistió en la exigencia de anteponer los intereses del país a los partidistas --"creo más en la ideas que en las ideologías, y en las personas que en los partidos", repitió como parte de su argumentario básico--, mientras el exdirigente socialista afirmó que "el consenso es necesario porque llevamos cuatro o cinco años de emergencia".

Monago recordó que hace ya un año que planteó la necesidad de la recuperación de un gran acuerdo nacional del nivel de los Pactos de la Moncloa de 1977, considerando que los acontecimientos de los últimos 10 años revelan "la necesidad de un tiempo nuevo". También González siguió esa línea, considerando que dichos acuerdos supusieron un cambio de estado de ánimo, en el sentido de "la verdad compartida".

El expresidente del Gobierno consideró que aún no se da ese estado de ánimo, pero abogó por avanzar hacia el mismo: "Pido a mis compañeros de partido y a los de su partido que empiecen a ponerse de acuerdo cuanto antes. Ahora que se critica la Transición, necesitamos otro periodo de 25 o 30 años con una base compartida". Monago insistió en que ambos, desde el PP y el PSOE, fueron los primeros en plantear esta idea y reclamó a la oposición "que deje el no" y al Gobierno "que deje de ponerse de perfil".

REDUCCION FISCAL Refiriéndose a las oportunidades de invertir en la región, el presidente extremeño recordó que próximamente se aplicará la bajada de impuestos y tasas ya anunciada en Extremadura. Monago detalló que se materializará "por la vía de exenciones, de reducción de base imponible, de tipos de gravámenes reducidos, deducciones en las cuotas, devolución de cuotas e incluso relajación de los requisitos exigidos para disponer de algunos de los beneficios actualmente vigentes". Esta medida fue anunciada por el presidente extremeño en diciembre, en su discurso de final de año, si se cumplía el objetivo de déficit, y el consejero de Economía la confirmó el mes pasado, cuando se conoció que Extremadura había alcanzado superávit en el primer trimestre.

Antes, Monago repasó los logros que sitúan a la región, a su juicio, en una buena posición para salir de la crisis, citando el cumplimiento del objetivo de déficit, las políticas de crecimiento que están iniciando, las decisiones "desde la centralidad" ("subir impuestos a los ricos", "mantener el tributo de patrimonio", "la extra a funcionarios", etcétera). También avanzó que hoy se publicará el decreto con las ayudas de 7.500 y 15.000 euros para autónomos. "Si alguien tiene una idea, Extremadura es el mejor ecosistema para ponerla en marcha", proclamó.

González reconoció las bondades de la comunidad para invertir, poniendo de ejemplo que ya hay casos de call-center (empresas de atención telefónica) en Extremadura más competitivas que en Brasil, donde estuvo de viaje la semana pasada. Pero se centró sobre todo en ideas como que es necesario apostar verdaderamente por el capital riesgo, crear oficinas de inversión operativas y el apoyo a empresas viables, pero en apuros por la falta de crédito.

Ambos repasaron además las ventajas que ofrece la región para acoger negocios, si bien Monago puso el acento en la buena situación de la comunidad para afrontar la recuperación gracias al cumplimiento del objetivo de déficit, mientras González se centró más en la necesidad de incentivar la recuperación del empleo: "Se están confundiendo los instrumentos con los objetivos", dijo.

OTROS ASUNTOS Finalmente, González y Monago abordaron asuntos como la necesidad de reducir la administración o la llegada del AVE a Extremadura. En el primer caso, el expresidente socialista consideró que "sobran las diputaciones", porque no se pueden mantener "cuatro niveles administrativos", bromeando con "otro cargo" para el presidente de la de Badajoz, Valentín Cortés, del PSOE, presente en el foro. En cuanto al AVE, apostó por buscar fondos interregionales para desarrollar una obra de "velocidad alta", en vez de "alta velocidad" y abrir la puerta a la inversión privada.

Asimismo, González defendió la monarquía, a pesar de reconocer la crisis que afecta a la institución y su escaso sentimiento monárquico, por su repercusión internacional. "No nos ha ido bien en las dos etapas republicanas", consideró abogando por "no jugar con las cosas de comer". Sobre el PSOE, admitió que está atravesando una nueva "travesía del desierto", así como que se está desgastando, al igual que el gobierno, lo que abre la puerta a procesos de "populismo y arbitrariedad".