Llevan 21 años consecutivos reuniéndose, cada año en un lugar, para celebrar todos juntos una jornada de convivencia y para cantarle a la Navidad. Ayer se juntaron en Badajoz alrededor de 1.200 scouts, ataviados en su mayoría con su uniforme característico, procedentes de todos los puntos de la región, desde Azuaga a Esparragosa de la Serena, de Coria a Valencia de las Torres.

Bajo el lema Presta la voz a los olvidados se celebró el XXI Festival Regional de Villancicos de Scouts de Extremadura en el pabellón de La Granadilla y disfrutaron de una jornada cargada de actividades deportivas, lúdicas y culturales, que comenzó en el parque Lusiberia.

El objetivo de este encuentro, según explicó el coordinador del festival, Pablo Javier Pinto, no es otro que "organizar una actividad conjunta todos los grupos de Extremadura, pasar el día entre amigos y disfrutar lo máximo posible". El movimiento scout cuenta en la comunidad con 1.700 socios que realizan actividades toda la ronda solar , desde finales de septiembre hasta el campamento de verano.

En el festival participaron 17 grupos y finalmente el que cantó el mejor villancico fue el organizador de la concentración: el grupo scout 513 Santa Teresa, de Badajoz. La mejor letra fue de Azimut; la música de Alezeia y la puesta en escena de Al-Kacides, todos de Cáceres.