Los nervios se erigieron ayer en protagonistas de la primera jornada de selectividad. Un total de 4.115 estudiantes extremeños iniciaban las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU), y con ellos sus padres y los profesores que les han acompañado en sus años de bachillerato, quienes no ocultan que estos días también son difíciles para ellos. "Es que hemos pasado mucho tiempo con ellos, son como nuestros niños, queremos que aprueben, que estudien la carrera que quieren y que sean felices", comenta una profesora del colegio Santa Cecilia de Cáceres poco antes de comenzar el primer examen.
Las marquesinas, el autobús y las puertas de acceso a las aulas de los exámenes se convirtieron ayer en improvisadas salas de estudio válidas para el último repaso apenas una hora antes de que se iniciara el primer examen. "Es que tengo memoria fotográfica y este último repaso es me ayuda a fijar lo que he estudiado", comenta una de las jóvenes a otra compañera que, como ella, porta un montón de apuntes mientras no puede parar de reír, "son los nervios", explica.
La escena se repite en las siete sedes de la región donde durante estas tres jornadas --hasta el jueves-- pondrán a prueba los conocimientos de los preuniversitarios extremeños que quieren dar el paso a los estudios superiores. La mayoría se examinan en Badajoz (880) y Cáceres (766) aunque también se han realizado las pruebas en Mérida (652), Plasencia (608), Zafra (627), Don Benito (245) y Villanueva de la Serena (337).
Llegó a hora
Para la mayoría de los estudiantes la jornada de ayer era tan temida como esperada, quizás por eso no podían parar de mirar el reloj, que avanzaba hacia la hora fijada para el inicio de los llamamientos --nueve y media de la mañana-- previos al examen de Lengua Castellana con el que se iniciaban las PAU.
Aunque algunos aseguran que han estudiado poco o nada, la mayoría han preparado estas pruebas durante los últimos quince días y en muchos centros han establecido clases de apoyo para todas o algunas de las asignaturas de las que se examinan. "Las comunes --Lengua Castellana, Historia, Filosofía y Lengua Extranjera-- son las que mejor llevo", apunta Ana Belén Rubio, que lleva más de un mes preparando estos exámenes porque este año repetía 2º de bachillerato con una asignatura. "Las que más temo son las materias optativas como Química", concluye. Quizás porque estas asignaturas suponen el 80% de la nota final en las PAU.
Los padres también se muestran inquietos estos días aunque se esfuercen por calmar la tensión de sus hijos con palabras de ánimo. "Es que se juegan su futuro en una nota, ellos lo saben y eso les crea mucha tensión", explica Mercedes Flores, madre de una de las chicas que ayer se examinaban en Cáceres.
La tensión y los nervios desaparecerán mañana, aunque tendrán que esperar hasta 23 de junio para conocer el resultado de estas tres jornadas de exámenes. Ese día, las notas aparecerán en la web habilitada por la Universidad de Extremadura, http://siue.unex.es/pau.
