La Central Nuclear de Almaraz (CNA) vuelve a fallar. La Unidad II de la planta se encuentra desconectada de la red eléctrica desde que el pasado domingo, a las 17.23 horas, sufriera una parada automática no programada tras detectarse un "bajo nivel" en un generador de vapor. Se trata de la tercera detención no prevista del reactor desde principios de mayo, cuando se produjo el incendio del generador. La avería podría solucionarse hoy.

Sin embargo, los colectivos ecologistas consultados sostienen que los reiterados fallos en el reactor número dos ponen en entredicho el funcionamiento de la instalación y aseguran que no se trata de un "riesgo insignificante" pues en este caso, según Greenpeace, la anomalía afecta al sistema de refrigeración de la unidad. Almaraz alberga dos de los nueve reactores nucleares españoles.

La nota difundida ayer por Almaraz recoge que "la desconexión de la Unidad II de la red eléctrica ha sido motivada por el cierre de la válvula de aislamiento del lazo 1 del sistema de vapor principal MS2-HV-4797A, provocando la actuación de los sistemas de protección del reactor y la consiguiente parada de la planta". La instalación añade que "todos los sistemas de seguridad han actuado con total normalidad".

ARGUMENTOS QUE NO CONVENCEN

Estas explicaciones no convencen ni a Greenpeace ni a Ecologistas en Acción. Carlos Bravo, del primer colectivo, sostiene que aunque los sistemas de emergencia funcionen éstos lo hacen porque se produce un riesgo importante en la instalación. Bravo añade que una nuclear no tendría que estar realizando paradas no programadas "cada dos por tres", lo que denota un "deterioro" de los equipos. "Están fallando cosas importantes".

Pablo Ramos, de Ecologistas en Acción, dedenunció la "falta de seguridad" y los "continuos fallos" por la "deficiente conservación" de la planta. La Unidad II se paró el pasado 3 de mayo por el incendio del generador. El 5 de junio recibió autorización para funcionar provisionalmente hasta que a finales de ese mes se detuvo de nuevo para montar una pieza. Sólo 23 horas después de arrancar nuevamente, el 2 de julio, tuvo una segunda parada no programada. La del domingo es la tercera.