La consejera de Sanidad y Dependencia de la Junta de Extremadura, María Jesús Mejuto, señaló ayer que el nuevo Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a la Dependencia (SEPAD) es un "importante avance, transformación y progreso en el abordaje del cuarto pilar del bienestar en nuestra comunidad".

La consejera hizo estas declaraciones en una comparecencia, a petición propia, ante la Comisión de Sanidad y Dependencia de la Asamblea, en la que intervino para describir los pilares principales que estructuran este nuevo organismo y dar cuenta de la aprobación por la Junta de la nueva estructuración de la Consejería de Sanidad.

Así, la consejera informó de que el SEPAD es un órgano autónomo cuyos presupuestos y la gestión de los recursos correrá a cargo de la propia consejería y su objetivo es "dar la cobertura y la prestación a aquellas personas que la ley les confiere", tales como mayores, discapacitados, personas con problemas de salud, con graves dificultades cognitivas o con problemas de nacimiento, entre otros. Además explicó que "conseguir la máxima calidad" y "mayor agilidad y dinamismo para la atención sin demoras" en cuanto a la prestación de los servicios de la Ley de Dependencia, son sus objetivos.

En cuanto a su estructuración, el SEPAD; cuyo director gerente es Juan Calós Campón Durán, contará con cinco gerencias territoriales: en Badajoz, Mérida-Llerena y Zafra, Don Benito, Cáceres, Plasencia-Coria y Navalmoral de la Mata, así como 20 subdivisiones sociosanitarias.

Por su parte, la diputada del PP, Teresa Angulo afirmó que, además de dificultar la labor de la oposición por no facilitar adecuadamente información sobre el SEPAD, la Junta crea un nuevo organismo que supone la aparición de nuevas estructuras administrativas que suponen un "incremento importantísimo de altos cargos", aunque con los mismos recursos anteriores, apuntó.