En sólo dos años, el número de presos extremeños encarcelados en centros penitenciarios de otros países se ha multiplicado por dos. Así, mientras en el año 2001 el número de extremeños presos en el extranjero era de 9 personas, en el año 2002 fueron 14 y en la actualidad el número asciende a 22 presos, un 144% más, según un informe de la Asociación de Derechos Humanos de Extremadura (Adhex).
Según este colectivo los principales problemas de estos presos son los jurídicos y los económicos. Los primeros se centran en poder contar con una buena defensa, desde su detención y durante la tramitación del procedimiento judicial, con el objetivo de que cuenten con todas las garantías procesales que la legislación correspondiente permita.
En muchas ocasiones, por otro lado, los detenidos y sus familias tienen que hacer frente a importantes cantidades de dinero para sufragar los gastos de abogados que, en la mayorías de las ocasiones "les estafan descaradamente".
El país extranjero en donde más presos españoles hay en estos momentos es Portugal en donde se encuentran encarcelados tres españoles. Le sigue de Francia, con tres presos, uno en Estrasburgo y dos en París; Estados Unidos, con dos presos, uno en Miami y otro en Washington; los Países Bajos, dos presos y Alemania, Austalia, Bélgica, Colombia, República Dominicana, Reino Unido, Suecia y Venezuela que tienen a una persona española encarcelada cada uno.
