Durante el año 2004, el último censado hasta el momento por el Instituto Nacional de Estadística, Extremadura registró un total de 5.560 bodas, es decir, un 27,94% menos que en 1975. En total se celebraron 2.155 enlaces menos que en aquel año.

En estas tres décadas se han formalizado 195.525 uniones conyugales en la región, con lo que la media anual asciende a más de 6.500 enlaces. Sin embargo, esa cifra no se supera en la comunidad desde 1992, cuando se casaron 6.601 parejas.

MUCHOS ALTIBAJOS La tendencia general durante los últimos 30 años es claramente descendente aunque con altibajos. El año con mayor número de matrimonios fue 1978, con un total de 7.854 bodas, y la mayor crisis en este tipo de celebraciones ocurrió en 1996, cuando sólo se alcanzaron 5.300 uniones. El incremento más pronunciado se produjo en el 2000, el único año de la última década en el que se ha superado la cifra de 6.000 bodas en la región, con un aumento de 446 uniones.

Las estadísticas sitúan el goteo en 71 matrimonios menos cada año. Sin embargo, en anualidades como la de 1993 la caída en los registros fue superior a los 600 enlaces. Asimismo, la tendencia no termina de estabilizarse: entre 1997 y el 2000 el saldo siempre fue positivo, mientras que en el 2001 y el 2002 volvió a caer por encima de las 250 bodas en cada uno; y entre el 2003 y el 2004 el incremento apenas ha llegado a superar las 120 uniones respecto a años anteriores.

MENOS QUE EN ESPAÑA Los datos facilitados por el INE arrojan otro tipo de circunstancias. Así, el descenso de matrimonios en la región en estas tres décadas es superior a la media nacional. Mientras en Extremadura el porcentaje ronda el 28%, en el global del país alcanza el 20,37%. Además, el número de bodas celebradas en la comunidad autónoma apenas representó durante el 2004 el 2,57% de las formalizadas en el territorio nacional, un punto por debajo que hace 30 años (3,5%).