Recuperar 40.000 volúmenes que los monjes jerónimos se llevaron del Monasterio de Yuste en 2011 a la Universidad de Comillas, situada en Madrid, porque sus instalaciones no se encontraban en las condiciones adecuadas y porque los libros necesitaban inventario. En este objetivo trabaja la Junta de Extremadura desde hace tiempo.
«Pondremos todo el interés y empeño por recuperar dichos libros», aseguró ayer la consejera de Cultura, Leire Iglesias, durante la presentación del libro ‘25 aniversario de patrimonio bibliográfico extremeño’, en la que también participaba el presidente de honor de la Asociación de Bibliófilos Extremeños (UBEx), Joaquín González, y el director general de Bibliotecas, Francisco Pérez Urban.
Según Iglesias, desde el 2013 la Asamblea de Extremadura ha confiado en recuperar la biblioteca de Yuste, en cambio ha indicado que «no acertaron a decir las causas por las que Extremadura dejó de tener propiedad y porque había salido la recopilación de materiales».
En esta línea, puntualizó que pese al «empeño» de organizaciones o de la Asociación de Bibliófilos Extremeños, «ese material no está en la región y nos pondremos en contacto con los monjes de Yuste para buscar cuál fue el origen de esa desaparición y testimoniar los libros que quedan pendientes en nuestra comunidad autónoma».
En 2011 se sacaron los libros «en teoría» para inventariar y hacer las obras de mantenimiento del Monasterio de Yuste porque en este lugar «no se encontraban con las condiciones adecuadas». A partir de ahí, «los libros nunca volvieron a Extremadura y no hay convenio con la Universidad de Comillas», dijo la consejera.
También, agregó que «no hay testimonio escrito, que nosotros conozcamos, de una cesión y transportación de esos libros y veremos las posibilidades de o bien traer dichos volúmenes o por lo menos volver a contar con el testimonio de lo que fue esa biblioteca».
Se pondrán en contacto tanto con los propietarios de la biblioteca como con la Universidad de Comillas para ver la fórmula de recuperación de los volúmenes o por lo menos tener acceso a ellos. Asimismo, reslató que es un patrimonio «muy importante» con volúmenes del siglo XV.
La conocida como Biblioteca de Yuste se trata de un patrimonio bibliográfico compuesta por libros, además de legajos y balduques, que estuvo más de 500 años en Extremadura y que posee un alto valor cultural y está íntimamente vinculada a la región.
En 2002 // La biblioteca se desmontó en 2002 por las obras que se hicieron en el cenobio verato, y diez años después, tras permanecer empaquetados los libros en cajas, en 2012, en vez de regresar al sitio donde estaban la orden Jerónima decidió que se quadaran definitivamente en Madrid, para desgracia de los extremeños.
Entre los documentos fugados se hallan 5.000 volúmenes de la colección de Vicente Cadenas y Vicens sobre Carlos V y que fue legada por éste al Monasterio donde el Emperador residió sus últimos años o los libros propiamente monásticos: cantorales y joyas de la bibliofilia como la Historiae Mundi de Cayo Plinio (1587), la Gramática Griega de Pedro Simón Abril (también de 1587), la Crónica General de España de Ambrosio de Morales (1577) o el Rheticorum de Marco Tulio Cicerón (1560), entre otros.
