Una economía muy ligada a los jornales agrarios, la falta de un tejido industrial o empresarial y un sector servicios meramente testimonial colocan a ocho municipios extremeños entre las 25 localidades con menor renta disponible de España, según datos que acaba de publicar la Agencia Tributaria.

Zahínos --en segunda posición tras la localidad granadina de Zafarraya-- abre la representación extremeña a la que se unen otros seis pueblos de la provincia de Badajoz y uno de la de Cáceres en esta clasificación, donde figuran poblaciones con más de 1.000 habitantes (2.964 municipios en todo el país).

"Hablamos de una situación enquistada no solo aquí sino propia de toda Extremadura porque hay muchos obreros del campo dependientes de los jornales", afirma Juan José Tornado, secretario en el consistorio de Zahínos.

Lo corrobora José Torvisco, alcalde de Higuera de Vargas (14º posición): "Somos un pueblo de trabajadores, de gente del campo. La industria es escasa y la gente no tiene medios para invertir en nuevos negocios", explica sobre la actividad económica allí.

El paradigma de dependencia de los jornales agrarios, ayudas al desempleo y ayuntamientos con recursos limitados para crear puestos de trabajo se repite en cada una de las localidades de la lista y da lugar a estas rentas bajas.

Así, Tornado echa en falta más inversión en "obras de envergadura" para no condenar a la población a "actividades de puro mantenimiento" mientras que Torvisco recuerda el relativo olvido en el que viven todos estos pueblos por parte de las distintas administraciones.

La Parra (4º), Oliva de Mérida (7º), Fuenlabrada de los Montes (9º), Ahigal (18º), Puebla de Obando (19º) y Esparragosa de la Serena, que cierra esta clasificación, son los otros municipios a la cola de este inventario.

Fuentes locales consultadas en los otros municipios corroboran ese círculo de dependencia agraria, desempleo y falta de inversión. No sucede eso en Fuenlabrada de los Montes, la excepción, un pueblo con un prominente sector apícola y cuyo alcalde, Ismael Higuera, se mostró sorprendido por la aparición de la localidad en este listado.

"No sé muy bien cómo interpretarlo porque creo que desvirtúa la realidad. Tenemos una tasa de desempleo del 20%, que para nuestra región es relativamente baja, y hay épocas en las que los apicultores no encuentran trabajadores", dice.

Fuenlabrada de los Montes se desmarca de este panorama de cierto inmovilismo económico pero da una pista de la correspondencia entre los datos y la realidad: "Puede ser que al final en la declaración de la renta, por la naturaleza del campo, se computen pocos ingresos, pero esto no significa pobreza", explica Higuera.

ECONOMIA SUMERGIDA Los trabajadores de las oficinas bancarias, los médicos de la localidad, profesores y algunos otros trabajadores son las únicas nóminas que probablemente se registran en Higuera de Vargas, según describe su regidor. En todo caso, ni él ni ninguna de las fuentes consultadas apunta directamente a algo que es conocido por todos: la prominente economía sumergida de la región.

La existencia de una economía informal o irregular en Extremadura ronda el 31% de su Producto Interior Bruto (PIB) según diferentes informes, como el 'Regional GDP growth in Spain' de la Agencia Fitch en 2015 o 'La economía sumergida pasa factura. El avance del fraude en España durante la crisis' del sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda en 2014, con lo que la renta real de muchos ciudadanos va más allá de las cifras que controla la Agencia Tributaria.

EMIGRACION Sin embargo, ni la economía sumergida ni la voluntad de los ayuntamientos es suficiente para frenar la sangría de pérdida de habitantes que vienen sufriendo estas poblaciones.

"Han tenido históricamente menos oportunidades, han tenido un castigo porque durante muchos años fueron exportadoras de personas, que precisamente se fueron a otras comunidades y probablemente a los municipios que salen con mejor renta, por lo tanto tienen una dificultad añadida con respecto a esos municipios", justifica el presidente de la Diputación de Badajoz Miguel Ángel Gallardo ante estos datos.

Sirven de ejemplo tanto Zahínos, que en los años 80 contaba con más de 3.200 habitantes mientras que hoy se queda en 2.800, como Higuera de Vargas, que llegó a tener 5.000 habitantes y en la actualidad apenas supera los 2.000.

Y si estos ocho pueblos están a la cola, a nivel regional Extremadura no sale mejor parada frente al resto de regiones: es la que cuenta con menor renta media bruta, 16.120 euros al año frente a la media nacional de 24.602 euros.