Lo que comenzó hace cinco años como un servicio puramente de comedor para los menores de familias extremeñas en situación de vulnerabilidad, se consolida como un recurso que va mucho más allá de cubrir las necesidades alimenticias de los pequeños.

Ayer comenzaron a funcionar los Espacios Educativos Saludables, en los que participan 980 niños y niñas hasta el próximo 1 de septiembre. En total, son 32 municipios extremeños los que están desarrollando este programa de lunes a viernes que culmina a las 15.00 horas con el servicio de comedor pero arranca a las 9.00 horas de la mañana. «Además de cubrir las necesidades básicas con un servicio de desayuno y almuerzo, realizamos actividades de distintos ambitos: culturales, de ocio y tiempo libre, de higiene y salud, de medio ambiente,...», explica José Aurelio González, secretario de Cruz Roja Extremadura.

Esta entidad es la encargada de desarrollar en la región este programa prácticamente desde sus inicios, en el 2013 cuando, conjuntamente con Cáritas, solo se ofrecía servicio de comedor. «Pero ese año en Badajoz ya lo asociamos con alguna actividad de ocio también».

Unos 300 voluntarios de las asambleas locales de Cruz Roja se encargan de las distintas actividades junto con un centenar de monitores contratados para este fin y también terapeutas que atienden a los menores con discapacidad. Las plazas ofertadas, algo inferior a años anteriores, están cubiertas en la mayoría de las localidades y hay listas de espera en los espacios de Don Benito y Cáceres. En la primera se ofertan 50 plazas, diez menos que el año pasado y en la segunda, hay otras 50 plazas. «También estamos pendientes de la llegada de los refugiados y podríamos aumentar el número de plazas en Mérida para atender a los menores que puedan llegar», explica González.

Para desarrollar este servicio la Junta de Extremadura ha destinado un millón de euros cofinanciados por el Ministerio de Sanidad. Los destinatarios son menores de entre 5 y 14 años en situación de riesgo o exclusión social que son detectados desde Cruz Roja o por los servicios sociales de base de las distintas localidades. Allí donde hay un mínimo de 20 menores se ha puesto en marcha un Espacio Educativo Saludable pero también hay dos casos, en Fregenal y en Fuente de Cantos, donde se atiende a niños de otros municipios próximos que son transportados en coches de Cruz Roja. En los municipios más pequeños el servicio de comedor se ofrece en restaurantes locales y en otros casos son encargados a empresas de cátering. «Tanto la restauración como el material que se emplea en las actividades se adquieren en empresas locales», destaca González.

El programa que ayer arrancó por quinto año consecutivo (aunque con cambios) concluye el 1 de septiembre, pero volverá a retomarse en diciembre, para cubrir las vacaciones de Navidad. Habrá unos campamentos del 26 al 30 de diciembre en Don Benito y Valencia de Alcántara, además de otras actividades puntuales diarias en Badajoz, Plasencia, Mérida, Cáceres y Almendralejo, en las que se esperan que participen 330 menores.