El paro registrado ha crecido en Extremadura en un 12,1% en los últimos seis años, según se desprende de los datos oficiales del INEM referidos a los meses de agosto del periodo 1999-2004. Así, en el primer año de referencia, las oficinas de empleo tenían pendientes 51.575 demandas de trabajo de desempleados, mientras que según las últimas cifras, ahora hay 57.803 personas que están a la espera de que se les ofrezca un empleo.

La tasa extremeña de incremento del paro registrado es más de cuatro veces superior a la media nacional, donde el desempleo ha crecido en el mismo periodo un 2,8%, pasando de 1.554.459 personas a 1.598.392, es decir, casi 44.000 más.

En lo que atañe a la región, el mal comportamiento del empleo se mantiene ya por tercer año consecutivo. Así, sólo en el periodo 2000-2001 hubo una reducción del paro, con un descenso que alcanzó el 6,5%, para repuntar después en porcentajes de entre el 5,7% y el 4,2%. En los últimos doce meses, la subida del desempleo fue del 5,4%.

PRECARIEDAD Al margen de las cifras globales, el mercado laboral extremeño continúa presentando dos lacras importantes, como son la gran incidencia del desempleo femenino y la alta tasa de temporalidad, que, además se ceba también con las mujeres.

En el primero de los apartados citados, cabe apuntar que la cifra de mujeres en paro supera las 36.000, frente a los 21.000 varones sin empleo, y todo ello a pesar de que la tasa de actividad femenina es apenas del 38,43% en la región, 27 puntos por debajo de la masculina. Cruzando estos dos datos se constata que el número de extremeños con empleo duplica al de extremeñas ocupadas.

En cuanto al segundo factor, durante el mes de agosto se realizaron un total de 22.884 contrataciones, pero apenas 640 fueron contratos fijos, frente a los 22.245 temporales.

De los escasos empleos indefinidos, los hombres coparon dos tercios, y poco más de 200 mujeres lograron trabajos estables.

Finalmente los datos del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales apuntan a que en este momento hay en la región 5.139 ofertas de empleo pendientes de ser cubiertas. Estas vacantes presentan una gran diferencia territorial, inclinándose de manera clara hacia la provincia de Badajoz, que copa 4.379 ofertas, mientras que en Cáceres apenas se localizan 760.