Buenas noticias para los mayores extremeños. La Junta de Extremadura va a establecer compensaciones en el copago farmacéutico para 21.500 pensionistas y personas con más de un 33% de discapacidad, que dejarán de pagar los medicamentos cuando los retiren de la farmacia. La medida aún está en fase de estudio, pero desde la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales ya avanzan que beneficiará a 21.500 extremeños con un ahorro estimado de 1,5 millones de euros.

La bonificación se aplicará a los pensionistas que perciban rentas inferiores a los 18.000 euros anuales (el tramo más bajo de copago farmacéutico), que desde julio del año 2012 contribuyen al sistema abonando el 10% del precio de los medicamentos con un tope de 8 euros mensuales. Además de estos, también dejarán de pagar los extremeños que tengan una discapacidad reconocida superior al 33% y se encuentren en el mismo umbral de ingresos, «ya sean activos o pensionistas».

La medida fue anunciada por el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, en su discurso del Debate sobre el Estado de la Región. Según explican desde la Consejería de Sanidad, ahora se está estudiando cómo implantarla «de la manera que sea más ventajosa para los beneficiarios y técnicamente factible», toda vez que el copago farmacéutico fue una medida implantada por el Ministerio de Sanidad y está regulada en un real decreto ley que es de obligado cumplimiento para las autonomías. Así, hasta que no se resuelva el procedimiento, desde el departamento que dirige José María Vergeles no han querido adelantar una posible fecha para su puesta en marcha.

Según explicó Fernández Vara el pasado junio, estas exenciones se compensarán con el ahorro producido por el nuevo contrato de transporte sanitario. «Nuestro compromiso social no es una cuestión de propaganda como algunos pensaban, nuestras palabras vienen acompañadas de compromisos reales», dijo entonces.

Cabe destacar que la decisión de aplicar exenciones en el copago farmacéutico llega después de que el Ejecutivo regional liquidara toda la deuda que mantenía con los pensionistas por los excesos de cobro en la anterior legislatura, ya que no fue hasta mayo del año pasado cuando el sistema informático se modificó para que dejaran de pagar una vez alcanzado el topo establecido en función de su nivel de renta (8, 18 o 60 euros mensuales). En total, se han devuelto 5,5 millones de euros a los pensionistas, que han recibido un bono farmacéutico que saldaba el derecho a la devolución mediante un descuento en la receta porque en muchos casos la cantidad era tan pequeña que no compensaba realizar una transferencia bancaria.