La delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, asume los errores que, según reconoció, se han cometido debido a la política informativa llevada a cabo desde la Delegación del Gobierno, y anunció que se rectificará "para que no se vuelvan a cometer".

Pereira pidió disculpas personalmente ante los medios de comunicación "por si alguna persona se ha sentido ofendida" por estos errores. Concretamente se refirió a una nota informativa emitida el pasado 29 de agosto en la que se indicaba que una mujer había aparecido degollada en una calle de El Gurugú cuando realmente ésta murió en su casa tras autolesionarse. "La nota que se envió en un primer momento fue bastante apresurada y no recogía con exactitud los hechos, lo que lamentamos", según Pereira, quien declaró que la Delegación del Gobierno ha recibido un escrito de la familia presentando sus quejas, por lo que anunció que los responsables policiales se reunirán con estas personas "para darles las explicaciones oportunas y en caso necesario pedirles disculpas si se les ha ofendido".

El otro caso al que hizo mención fue el del homicidio de Cortegana, sobre el que la delegación emitió una nota de prensa el pasado sábado en la que decía "que el cuerpo del hombre no tenía signos de violencia física, con lo que se quería decir que no tenía heridas de arma blanca ni de fuego, pero estaba amordazado y eso es un acto de violencia", añadió. La política informativa fue analizada en la Junta Regional de Seguridad celebrada el pasado martes.