La Consejería de Educación desarrolla un programa de Aprendizaje Social y Emocional (ASE) en colegios e institutos de la región con el fin de mejorar la comunicación entre los miembros de la comunidad educativa, contribuir al rendimiento académico y minimizar los incidentes por mala conducta. Se trata del primer proyecto de inteligencia emocional aplicado íntegramente en centros de Primaria y Secundaria de España, que ha comenzado a desarrollarse este curso, de forma experimental, en los institutos Sáenz de Buruaga, de Mérida; San Fernando, de Badajoz, y Maestro Gonzalo Korreas, de Jaraíz de la Vera, y en el colegio Santiago Ramón y Cajal, de Plasencia.

Un total de 300 personas, miembros de las comunidades educativas de estos centros, participan en este programa que es un ejemplo de medida de actuación para la promoción de la calidad educativa. Los programas de inteligencia emocional triunfan en el panorama empresarial desde hace diez años, en Europa, Japón y Estados Unidos, y comienzan a ser claves en sus sistemas educativos debido en parte a la oleada de agresividad y mala conducta detectada en las aulas.