Hay vía libre ambiental para acometer las obras, pero no hay el dinero suficiente para hacer algunas de ellas en el tiempo inicialmente previsto. El plan de infraestructuras viarias --aprobado en el año 2008 por el Consejo Extraordinario de Gobierno celebrado en Mérida para desarrollar casi 200 actuaciones hasta el año 2015-- tiene el visto bueno en materia ambiental, aunque la ejecución de algunas de esas obras se va a posponer por la falta de dotación presupuestaria como consecuencia de la crisis. Así lo reconoció ayer el consejero de Fomento, José Luis Quintana en la Asamblea de Extremadura al contestar a una interpelación formulada por el diputado popular Víctor del Moral sobre la política general de la Junta en materia de carreteras. El plan establece prioridades que no se van a retrasar, pero sí otras actuaciones que no lo son tanto, como la autovía Zafra-Jerez, cuya ejecución sufrirá retrasos por cuestiones presupuestarias. Mientras tanto, el PP denuncia la paralización de la licitación pública con el consiguiente perjuicio para el sector de la construcción de la región.

Quintana anunció que el Diario Oficial de Extremadura (DOE) publicará en unas semanas la resolución ambiental positiva de este plan que, con una dotación de 4.055 millones de euros, "sufrirá un retraso en la ejecución, pero no la renuncia a ninguna de sus actuaciones", comentó. En este sentido, indicó que de las 176 obras previstas en este plan, hasta la fecha se ha actuado en 46, "por lo que la política de la Junta continúa su caminata aunque con las adaptaciones" que conlleva la situación económica.

Conviene recordar que el plan diseña la futura red de carreteras dependientes de la Junta, conformada por un total de 3.871,74 kilómetros, de acuerdo al tráfico previsible en el año 2015. Comprende que todas las vías de comunicación de la región que tengan una intensidad media diaria de tráfico superior a los 10.000 vehículos, o que haya una previsión de crecimiento de tráfico en los próximos años hasta alcanzar esa cifra, se transformarán en autovías; y si la intensidad es superior a 5.000 vehículos, serán vías rápidas.

Entre las actuaciones que incluye destacan la terminación de la EX-A1 (Plasencia-Portugal), la mencionada EX-A3 Zafra-Jerez, y la EX-A4 (Cáceres-Badajoz), además de otras como la ronda sur de Cáceres o el nuevo puente de Mérida.

El plan de infraestructuras viarias integra también actuaciones en 621 de los 1.327 kilómetros de la red de carreteras convencional, 587 de los 948 kilómetros de la red intercomarcal y 778 de los 1.358 kilómetros de carreteras locales.

En todo caso, el consejero recordó que el objetivo principal del plan es la mejora de la seguridad vial de las carreteras extremeñas, mediante una modernización de la red viaria, una mejora de la conectividad de la región y la vertebración territorial, lo que contribuirá a mantener la población en el territorio.

APENAS 295 MILLONES Sin embargo, para el diputado del PP la licitación pública de carreteras ha desaparecido de los boletines oficiales "desde hace meses", con el perjuicio que eso supone para el sector de la construcción en la región. Según los datos que aportó Del Moral, hasta el momento el Gobierno extremeño sólo ha licitado obras por valor de 294,5 millones de los 4.055 fijados en el plan, con lo que "las cuentas no salen".