Incrementar el consumo interno de muebles, dinamizar las ventas, fomentar el crecimiento de la economía regional y proporcionar actividad a las empresas del sector. Estos son los objetivos del Plan Renove de Mobiliario de Hogar aprobado ayer mediante decreto por el Consejo de Gobierno, que concederá ayudas de hasta 200 euros por mueble comprado y hasta un máximo de 1.000 euros por comprador en cada convocatoria.

La portavoz del Gobierno regional, Isabel Gil Rosiña, manifestó ayer que se trata de un decreto «totalmente novedoso» del que podrán financiarse unas 5.000 actuaciones por cada convocatoria, con una ayuda media de 150 euros por actuaciones. En concreto, este decreto contempla un sistema de ayudas dirigidas al consumidor final, que supondrá un descuento del 25 % del valor de cada mueble que se adquiera en un establecimiento comercial ubicado en Extremadura y que esté adherido al plan, con una cuantía máxima de 200 euros por mueble y de 1.000 euros por comprador en cada convocatoria.

La Junta de Extremadura destinará 750.000 euros anuales a estas ayudas, para la que se publicarán tres convocatorias, de 2016 a 2019, avanzó Rosiña. A su juicio, uno de los efectos adversos más importantes de la crisis económica ha sido la contracción del consumo y el estancamiento de la demanda y destrucción de empresas y, precisamente, una de las caídas de consumo más fuertes se ha registrado en el sector del mueble, reduciéndose a la mitad, un 51%, el gasto medio en equipamiento de muebles para el hogar.

Además de estas ayudas, Rosiña se refirió a otros acuerdos adoptados en el Consejo de Gobierno, entre ellos, un convenio que se suscribirá con la Universidad de Extremadura para realizar estudios relacionados con el sector turístico regional, y, en materia de Sanidad y Políticas Sociales, la creación de 30 plazas asistenciales, en Badajoz, para la atención de personas con trastorno mental grave.