La crisis económica en la que está sumida Plasenzuela no solo no mejora, sino que va a peor. A las millonarias deudas que arrastra el consistorio --la mayoría provenientes de la gestión de la corporación anterior-- se suman ahora los impagos en la residencia de ancianos Padre Damián: los trabajadores llevan tres meses sin cobrar y los gestores del centro de mayores no abonan al ayuntamiento el arrendamiento.

Para el alcalde plasenzuelano, el socialista Adrián González, "todo en el pueblo va a peor; Plasenzuela se va a morir y los del equipo de gobierno estamos deseando que lleguen las elecciones para marcharnos; esto ni tiene solución ni interés por parte de nadie en solucionarlo".

La deuda municipal se estima en algo más de 5 millones de euros y por este motivo está imputado, entre otros, el anterior alcalde, José Villegas, al que se le acusa de apropiarse de más de dos millones en ayudas para la residencia de ancianos y defraudar 2,2 millones a la Seguridad Social.

Pero el principal problema, según el actual regidor, es que hay una especie de círculo vicioso que nadie rompe: las deudas crecen exponencialmente; las entidades financieras no les prestan dinero para amortizarlas "porque nos exigen unos requisitos imposibles de cumplir"; y como no pueden pagar lo adeudado, "tampoco podemos pedir ayudas públicas. La única solución es salir corriendo en cuanto se convoquen elecciones".

González recuerda que en el mes de febrero tanto desde la Subdelegación del Gobierno como desde la Tesorería de la Seguridad Social se ofrecieron a mediar para lograr que alguna entidad financiera les concediera un préstamo de 500.000 euros con los que hacer frente a la cuota obrera sin abonar por parte del ayuntamiento. Saldar esa deuda era requisito indispensable para poder obtener ayudas públicas. "Han pasado ocho meses --señala el alcalde-- y nadie nos da dinero".

MAS PROBLEMAS El consistorio está al día con sus trabajadores gracias al dinero adelantado hace unos meses por la Diputación de Cáceres y a la venta de algunas propiedades municipales. Pero no ocurre lo mismo con los 32 empleados de la residencia Padre Damián, que administra Gestiones Hoteleras Rurales.

Los trabajadores de ese centro hicieron público ayer un comunicado en el que denuncian que llevan desde agosto de este año sin cobrar "por problemas de liquidez de la empresa". Este hecho fue confirmado también por el alcalde de Plasenzuela, que asegura que el dinero que la Junta les transfiere para pagar las 42 plazas que el centro tiene en régimen de asistida está retenido, "como nos obliga la ley", porque los reponsables de la residencia llevan tiempo sin abonar al ayuntamiento los 18.000 euros mensuales de alquiler.

"Los trabajadores --dicen en su comunicado-- nos encontramos en medio de todo esto y sufrimos los problemas que conlleva". Más aún, se quejan de que hay días en los que en el turno de mañana solo hay 4 o 5 personas trabajando y auguran que los que también van a empezar a sufrir las consecuencias del problema son los ancianos (ahora cuidan a 72 mayores).

Los empleados de Padre Damián también emplazan a la Junta a que vele por las plazas que tiene concertadas y medie en la disputa entre ayuntamiento y empresa.

Pero el tema de la residencia puede terminar en los tribunales. Por un lado, el secretario municipal ha pedido a la residencia las cuentas del 2009 y de lo que va de este año para fiscalizar la gestión, aunque Adrián González asegura que no solo no se las han facilitado, "sino que hemos recibido insultos y amenazas por parte de responsables de Gestiones Hoteleras Rurales".

Hace ya meses que ambas partes no dialogan, según el alcalde. "La empresa plantea traspasarnos la gestión de la residencia, pero quiere que nos quedemos con los trabajadores. Nosotros le hemos dicho que asumimos la gestión, pero sin obreros". A partir de ahí, señala González, únicamente ha habido insultos y amenazas hacia su persona.