En el año 2017 habrá en Extremadura tres personas en edad de trabajar (3,09) por cada jubilado, una cifra similar a la del 2002 (3,06), según las proyecciones de población elaboradas por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Por lo tanto, la región será una de las comunidades autónomas que no pierda población en esta franja y que mantenga un incremento constante del número de ciudadanos que pueden acceder al mercado laboral.

Estas cifras se deben a que el sector de población de entre 20 y 64 años crecerá durante este periodo en 43.814 personas, un 7,1%, mientras que el de extremeños de 65 años en adelante se incrementará en 11.990, un 5,9%. De esta forma, según los cálculos del INE, en el 2017 habrá en la región 658.075 extremeños en edad laboral y 212.467 jubilados. Si se comparan estos dos aumentos se observa que la cifra de crecimiento del sector poblacional con menor edad es cuatro veces mayor.

A ello contribuirá la llegada de inmigrantes a la región, ya que el Instituto Nacional de Estadística sostiene que de seguir el ritmo actual de incorporación de extranjeros a la comunidad extremeña, la población crecerá en 11.000 personas durante los próximos años, aunque también advierte que de estancarse este fenómeno la región podría perder cerca de 2.000 habitantes.

LOS PROBLEMAS Como en las demás regiones, el envejecimiento de la población extremeña en los próximos años será constante, pero se acentuará en un futuro no muy lejano. Además, durante el periodo estudiado por el INE la población joven de Extremadura se reducirá en 33.566 personas, es decir, un 13,7%. Esto supondrá también que por cada niño habrá tres habitantes en edad de trabajar.

Atendiendo a los datos del estudio, el sector comprendido entre los 0 y los 19 años pasará de 243.410 personas en el año 2002 a 209.844 en el 2017. Cabe destacar un dato para la esperanza, las proyecciones poblacionales del estudio indican que para esa fecha habrá casi 2.000 niños más de entre 0 y 4 años.

El problema se le presentará así a la región sobre el año 2050, ya que el sector con edad de jubilación habrá incorporado al grueso de los extremeños que en el 2017 se encontraban en edad laboral, un grupo que podría estar próximo a las 400.000 personas, mientras que la franja de los que pueden acceder a un trabajo se reducirá considerablemente. Es decir, a partir del 2017 el envejecimiento extremeño será muy rápido.

Curiosamente, el consejero de Sanidad y Consumo, Guillermo Fernández Vara, mostró ayer su preocupación por la incidencia que esto supondrá también en los servicios de atención sanitaria destinados al sector de población más viejo.

En este sentido, el consejero aseguró que la sociedad está reconociendo progresivamente que en el futuro habrá que curar y cuidar a unos 120.000 extremeños que contarán con una edad superior a los 75 años.

Por otra parte, en cuanto al crecimiento global de la población por provincias, es Cáceres la que registra un mayor aumento porcentual en el periodo del estudio. La provincia cacereña ganará 9.466 habitantes hasta el año 2017, alcanzando las 412.903 personas, lo que supone un aumento del 2,3%, mientras que Badajoz sumará 12.772 habitantes, un incremento del 1,9% que situará a la provincia con 667.483 personas.