Extremadura, Murcia y Canarias son las comunidades españolas que registran un consumo más bajo de carne de pollo, según los datos del informe ´Alimentación en España 2005´ elaborado por Mercasa.

El estudio indica que cada español consume una media de 17,1 kilos de pollo al año, de los que el 83,7% corresponde a consumos en los hogares, el 12,1% a los restaurantes y el 4,2% a los denominados consumos institucionales.

Los consumos más elevados de carne de pollo se registran en Valencia, La Rioja y Castilla-La Mancha.