La huelga de celo emprendida por los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía desde finales del pasado mes de mayo ha reducido considerablemente las estadísticas de todas las acciones que emprenden los agentes por iniciativa propia, como son los controles en busca de drogas para el autoconsumo, armas blancas u otros objetos ilícitos.

Se trata de una medida de protesta contra el recorte salarial aprobado por el Gobierno central en todo el sector público como medida para contener el gasto y paliar el déficit de las cuentas del Estado, que en ningún caso afecta a situaciones de emergencia o a las llamadas que realizan los ciudadanos, que se atienden con normalidad.

Según datos aportados en un comunicado por la Confederación Española de Policía (CEP) de Extremadura, la Jefatura Superio de esta comunidad autónoma ha registrado un descenso de las actas levantadas en un 94%, mientras que las identificaciones y los cacheos lo han hecho en un 75%.

La medida de protesta anima a los funcionarios a realizar estrictamente las disposiciones reglamentarias "y nada más", uniéndose al resto de la plantilla nacional en protesta por la bajada de sueldos acordada por el ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.

No obstante, la postura adoptada por los agentes queda sin efecto si el agente tiene una sospecha muy clara de que se está cometiendo un delito o un acto que pueda estar alterando la seguridad ciudadana, añade el comunicado.

ENTRE 90 Y 150 EUROS AL MES La reducción salarial a los efectivos policiales oscila, dependiendo de la escala a la que pertenezca el agente, entre los 90 y los 150 euros mensuales, y entre 150 y 400 euros en la paga extraordinaria de diciembre. Frente a esta "injusticia" la confederación de agentes policiales han tomado otras medidas. De esta forma, se sumaron a las concentraciones convocadas por el sindicato CSIF frente a las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno en la comunidad autónoma extremeña, y asimismo tomaron parte en la huelga de funcionarios celebrada el pasado 2 de junio.

La ruptura de las relaciones con el Ministerio del Interior, y la presentación de una queja formal ante el Defensor del Pueblo para que interponga en nombre de los agentes un recurso de inconstitucionalidad, son otras de las acciones llevadas a cabo en esta materia.

La Confederación Española de Policía traslada a los ciudadanos que la huelga de celo "no reducirá, en ningún caso, su seguridad, ya que en la persecución del delito y emergencias se actúa con la misma celeridad. Tan solo se verán afectadas las infracciones administrativas --añade-- relativas a la protección de la seguridad ciudadana y la estadística, que tantos réditos mediáticos proporcionan al Ejecutivo central y a la Delegación del Gobierno de Extremadura".

Este diario se puso en contacto con esta institución para conocer su parecer al respecto, pero no obtuvo respuesta.