Dos extremeños, uno de ellos el conocido mentalista Carlos Santillana y otro el dueño de una clínica de naturopatía de la zona de Azuaga, están implicados en una red nacional de falsos médicos que ha desarticulado la Policía Nacional. En la operación, denominada Estudiante , se ha detenido, por presuntos delitos de falsedad documental e intrusismo profesional, a 27 personas, otras 12 están imputadas y se han intervenido dos academias que ofrecían títulos universitarios por 18.000 euros.

En estas academias, ubicadas en Málaga y Alicante, ofrecían, según la Dirección General de la Policía, expedientes académicos y falsos títulos universitarios de médico cirujano, psicólogo, médico en terapia física y rehabilitación... supuestamente emitidos por universidades peruanas. Los detenidos los habrían obtenido previo pago de unos 18.000 euros y, amparados en sus falsas titulaciones, ejercían en clínicas privadas en las que inyectaban silicona o bótox, recetaban fármacos o ejercían como fisioterapeutas.

La información policial destacó, por grave, el caso del detenido cacereño, "que trabajaba en residencias de la tercera edad y su imprudencia profesional casi les cuesta la vida a dos ancianos por la receta de unos fármacos". Fuentes cercanas a la investigación confirmaron a este diario que estos hechos, aunque atribuidos a Santillana, no han ocurrido en ningún centro extremeño, sino de Andalucía, donde Carlos Santillana, --en realidad, Juan Carlos Cofrade, verdadero nombre del mentalista cacereño--, se trasladó hace aproximadamente un año y medio, cuando el Colegio de Médicos de Cáceres dio la voz de alarma sobre el caso.

ELECTROS AL REVES Una vez hecha pública ayer por la Policía esta operación, este diario pudo saber que fue una mutua de Plasencia, donde trabajaba Santillana haciéndose pasar por médico, la que puso sobre la pista de su falsa titulación. Empezaron a sospechar de él, --se asegura que "porque miraba los electros boca abajo"--, y llamaron al Colegio de Médicos de Cáceres, que confirmó que no estaba colegiado. La mutua, alegando este hecho, lo despidió y él acudió entonces a colegiarse, presentando, primero, un título de una universidad de Perú, y después, porque en el colegio no se fiaban, un expediente académico. "No hubo más remedio que colegiarlo, señaló ayer a EL PERIODICO el presidente, Carlos Arjona, porque el Ministerio de Educación y Ciencia al que se había consultado sobre el título aportado confirmó que era auténtico, como también la homologación en España". Arjona concluye: "es que realmente las falsificaciones son perfectas".

Pero las dudas se mantenían y aprovechando el viaje a Perú de una colegiada, se le encomendó que consultara en la Universidad de Santa María de Porres, centro que había expedido el título de Santillana. "Entonces fue cuando se nos confirmó que el expediente aportado era real, pero de otra persona. Inmediatamente se le dio de baja en el colegio y se denunció el asunto a la Fiscalía".

El colegio dio así la voz de alarma sobre unos hechos que en la Fiscalía Superior de Extremadura se calificaron de "muy graves", y sobre los que se abrió una investigación además de informar al Servicio Extremeño de Salud.

Todo esto ocurría en mayo del 2007, y Carlos Santillana trabajaba por aquel entonces y desde hacía dos meses en la residencia geriátrica de Care, en Villafranca. Con ella se puso en contacto el SES nada más saber de su intromisión, "pero cuando el centro le iba a comunicar el despido él, que se había percatado de lo que estaba ocurriendo, ya se había marchado, no solo del centro, sino de la comunidad", indicaron las fuentes consultadas.

El Colegio de Médicos alertó a todos los colegios de España del caso, "por lo que sabemos que no ha intentado colegiarse en ningún otro, aunque creemos que está en Andalucía, donde parece ser que ha seguido ejerciendo en algún centro privado".

DETENCIONES El falso médico cacereño fue detenido el 7 de agosto. En la comisaría de Cáceres se le tomó declaración y, tras instruirse las diligencias, quedó en libertad con cargos.

Así se encuentra también el falso médico pacense detenido en la misma operación policial. En este caso se trata del dueño de una clínica naturópata ubicada en un pequeño municipio de la zona de Azuaga donde ejercía como licenciado en Medicina y Psicología. Fue detenido el 25 de septiembre y tiene numerosas causas penales pendientes. En su caso, según señaló a este diario el secretario del Colegio de Médicos de Badajoz, no estaba colegiado: "nunca lo solicitó".