El Ministerio de Medio Ambiente luso ha pedido al Gobierno español que el estudio de impacto ambiental sobre la Refinería Balboa en Tierra de Barros incluya más información sobre los riesgos de contaminación que el proyecto del Grupo Gallardo puede generar en los suelos y recursos hídricos de Portugal.

La Agencia Portuguesa del Ambiente (APA) ha alertado de la necesidad de evaluar los riesgos de contaminación que supondrá la construcción de esta instalación, ya que considera que en el informe de consulta pública del proyecto hay "escasa información sobre la gestión de los residuos". Así, el ministerio luso defiende que el estudio de impacto ambiental no hace referencia a las consecuencias transfronterizas.

En particular, en lo que se refiere a las emisiones contaminantes, la APA indica que debe tenerse en cuenta la calidad del aire del Alentejo Interior, territorio portugués fronterizo con Extremadura. Pero también consideran necesario verificar si la actividad de la refinería se encuadra en la Convención sobre Efectos Transfronterizos de Accidentes Industriales, que tiene como objetivo prevenir y reparar accidentes con efectos más allá de la frontera de un país. Por ello, recomienda que se evalúe el impacto en la desembocadura del Guadiana de "posibles situaciones de siniestros que arrojen sustancias peligrosas para los organismos acuáticos".

GARANTIAS EN ALQUEVA El Instituto del Agua (INAG) portugués también ha evaluado el proyecto y establece que es necesario analizar e identificar los potenciales impactos sobre el Guadiana. "No puede, bajo ninguna circunstancia, poner en peligro el abastecimiento público, sea directamente a través de la albufera de Alqueva, o indirectamente a través de la transferencia para otras iniciativas del Proyecto de Múltiples fines de Alqueva", han indicado desde esta organización. Ante esta situación, el INAG defiende la realización de "un estudio lo más detallado posible", con conclusiones técnicas y científicas que garanticen que la planta de refino no interferirá en los objetivos definidos para esta región fronteriza.

También la institución Turismo de Portugal cree insuficiente el estudio hecho sobre este territorio luso y recomienda un análisis detallado del área del embalse de Alqueva y la desembocadura del Guadiana.

Por su parte, el Grupo Gallardo no quiso pronunciarse ayer sobre estas reclamaciones y se remitió a las palabras del primer ministro portugués el pasado mes de enero, cuando José Sócrates garantizó que el proyecto de la refinería en Tierra de Barros no afectará a la calidad de Alqueva ni supondría ningún riesgo ambiental para la zona ni para sus intereses económicos.