En el actual escenario económico, y ante el hecho de que en estos momentos casi una veintena de cajas de ahorro de España debaten sus procesos de fusión, el presidente regional del PP, José Antonio Monago, dio ayer un giro en el que hasta ahora ha sido su planteamiento en esta materia al abogar por la "fusión virtual" de todas las cajas de ahorro españolas en una sola. Defendió, eso sí, una hoja de ruta en la que el primer paso sea la fusión de las cajas extremeñas.

Esta propuesta de Monago, la fusión virtual de todas las cajas en una única --similar a la que mantienen las cajas rurales-- y no en cuatro o cinco como ha planteado el Banco de España, la calificó de "muy atrevida" la portavoz de la comisión permanente de la Ejecutiva regional del PSOE, María Ascensión Murillo, que al mismo tiempo pidió al presidente del PP "respeto" para con los órganos de dirección de las cajas de ahorro en la posible fusión. Para Murillo la actitud del dirigente popular evidencia que "desconfía de los órganos de dirección de estas entidades financieras" en las que, dijo, "es preciso confiar".

Pero Monago defendió su propuesta de fusión virtual por considerar que con ello "se crearía el mayor operador financiero del país, mayor incluso que los dos bancos más grandes", al tiempo que supondría "consolidar la fusión financiera pero manteniendo las plantillas, oficinas, sedes y obras sociales de cada entidad".

Y supondría además, explicó el presidente del PP en un comunicado, compartir recursos financieros, operativas de funcionamiento y experiencias acumuladas, lo cual, a su juicio, "les haría acreedoras de un potencial de futuro que acabaría con el mapa de incertidumbre que en estos momentos pesa sobre todas ellas".

Destacó asimismo que una fusión virtual "tendría muchas más garantías de éxito", pues "eliminaría el problema de la competencia de la banca y les dotaría de una presencia mucho más activa de cara a impulsar una obra social sin perder la marca local".

A juicio del presidente del PP la actual situación económica "exige la fusión de cajas" y que se debata sobre esta cuestión, "todo con el fin de garantizar el futuro de estas entidades", las cuales, añadió, "no pueden ser el brazo financiero de los gobiernos autonómicos". En su opinión hay, además, que dejar de hablar de cuestiones "que nada tienen que ver con el futuro de las cajas de ahorro", como dónde estarían las sedes, quiénes las dirigirían, cómo se haría el reparto de poderes o las cuotas de la participación de los políticos en sus direcciones.

Por su parte, la dirigente socialista apuntó que "no le corresponde" a los partidos ni al Gobierno de la Junta "el hablar o impulsar una fusión". Recordó que sobre este asunto ya hay un dictamen, un acuerdo que salió del debate parlamentario en el seno de la Asamblea, en el que se hizo la recomendación de fusionar las cajas para tener una entidad financiera fuerte, "y a partir de ese momento se acabó nuestro papel, pues siempre dijimos que confiábamos en los órganos de gobierno de las propias cajas".