El Partido Popular de Extremadura considera que la venta de 21.000 viviendas sociales propuesta por la Junta para hacer frente a la crisis "es un disparate", ya que contribuirá a agravar la crisis inmobiliaria. Los populares reclamen al Gobierno regional que rectifique el error.Según recoge la agencia Europa Press, el secretario de Comunicación del PP extremeño, Tomás Martín Tamayo, aclara que no culpan a la Junta de la "crisis galopante" que sufren la agricultura o el sector inmobiliario, pero sí le reclama que busque soluciones a la crisis con medidas que no supongan un disparate, como la venta de viviendas sociales, con la cual, según Tamayo, la Junta "pretende engrosar los presupuestos de 2009".Pide soluciones, no parches"En Extremadura hay que buscar soluciones de dentro a un problema que viene de fuera", sentencia Martín Tamayo, que exige "algo más que soluciones de parcheo" como "la competencia con el sector" que plantea, dice, la Administración autonómica. También reclama el "cese fulminante" del "inútil" consejero de Fomento, José Luis Quintana, quien a su juicio es el responsable de la medida "error" de la venta de viviendas sociales, y rechaza también que éste acusase al PP, según Tamayo, de "dar una puñalada empresarial al sector" por las críticas de dicha formación política a la medida. En esta línea, apunta que a su juicio "lo que debe hacer la Junta es intentar dar soluciones a la crisis galopante", fundamentalmente en una región "pobre" como Extremadura que "es de las que más se resiente" de dicha situación, y plantea que incluso para el PP hubiese sido pertinente la celebración de un debate monográfico en agosto en la Asamblea para arbitrar medidas para paliar la "crisis".