El Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea de Extremadura propone que la reforma del Estatuto de Autonomía extremeño establezca la creación de una ley de objetivación de inversiones en los ayuntamientos y de una oficina de control presupuestario.

Según recoge la agencia Europa Press, estos son dos de los asuntos que el PP defenderá en la ponencia del grupo de trabajo para la reforma del estatuto extremeño, que se reúne mañana, y en la que los populares esperan que pueda ser aceptado por el Grupo Parlamentario Socialista debido al "espíritu de consenso" que existe en estas negociaciones.

El secretario general del Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea de Extremadura y miembro de la ponencia para la reforma del Estatuto de Autonomía, Manuel Barroso, resalta que el nuevo estatuto "apuesta firmemente por el municipalismo" y reconoce "la necesaria financiación del mundo rural, las relaciones de la administración regional con las mancomunidades", así como la "asfixia" de los ayuntamientos. "Son problemas que el estatuto debe respetar y amparar desde una premisa fundamental, como es la autonomía local".

En ese sentido, Barroso reclama una Ley de Objetivación de Inversiones para los ayuntamientos de Extremadura, de tal forma que "a igual población, los ciudadanos deben recibir los mismos servicios", aunque reconoce que en este punto existen "algunas discrepancias" con el PSOE.

También muestra la intención del PP de que el nuevo texto convierta la Asamblea "en el centro del debate político", y en este sentido propuso la creación de una oficina de control presupuestario, para "arrojar claridad en el uso del dinero público, transparencia en los fondos públicos, y rendición de cuentas en el Parlamento".

La deuda histórica

Por otra parte, Barroso destaca que ya existe acuerdo entre ambos grupos políticos sobre la inclusión de la deuda histórica en el nuevo texto, de tal forma que se tiene previsto crear una comisión mixta que en el plazo de un año cuantifique esta deuda, y a partir de ahí se establece un periodo de tres años para ser abonada por parte del Gobierno central.

Además, el diputado del PP también subraya la necesidad de que este Estatuto reivindique "una imagen de Extremadura alejada de estereotipos", y que se reconozca una región "moderna, con proyección exterior en Europa y especialmente con Portugal y con Iberoamérica". En su opinión, el texto debe marcar "un punto de inflexión entre lo que ha sido Extremadura y lo que tiene que ser".

Así, Barroso remarca el "buen clima" y el "trato cordial" que ha presidido las negociaciones entre los dos grupos para la reforma del Estatuto de Autonomía, de los que destaca además la "clara intención de consenso" que ha existido.