El margen que tienen los municipios y las empresas concesionarias para establecer libremente las tarifas del agua corriente genera grandes diferencias entre los precios que paga una familia media (de cuatro miembros) en función de la ciudad en que reside. Un estudio de la organización de consumidores Facua ha detectado la gran diferencia de tarifas existente en 28 ciudades españolas, incluida Badajoz. Los datos recabados por EL PERIODICO EXTREMADURA muestran también que Plasencia es la ciudad de la región con el agua más barata, mientras que los ciudadanos de Mérida son los que más pagan por el servicio.

Sin incluir el IVA y atendiendo a los datos recabados por Facua, la tarifa media mensual (incluida la cuota fija y un consumo de 12,5 metros cúbicos en una hogar de cuatro personas) en España es de 8,27 euros (1.376 pesetas). De las cuatro mayores ciudades de Extremadura, sólo Mérida (8,93 euros mensuales) está por encima de esta media, mientras que Badajoz (6,25 euros), Cáceres (7,52) y Plasencia (3,32 euros) están por debajo.

FACTURA ANUAL A simple vista pueden parecer diferencias de poca importancia pero al multiplicar la tarifa media por doce meses resulta que en Mérida se pagan 107,1 euros anuales, por 90,2 de Cáceres, mientras que en Badajoz se cobran 75 euros y Plasencia 39,8 euros. O lo que es lo mismo, en la capital placentina se paga dos veces y media menos por el agua que en Mérida. En euros, la diferencia anual es de 67,3 (casi 11.200 pesetas).

Según el estudio de Facua, en España hay diferencias de hasta el 761% entre las ciudades con el agua más barata (Valladolid) y las más caras (Murcia y Alicante). Los ayuntamientos, competentes en el suministro domiciliario de agua en España, otorgan una concesión a empresas públicas, privadas o de capital mixto. En la factura se suele cobrar una cuota fija --3,73 euros mensuales de media en España--, que no existe en el caso de Valladolid. La cuota variable oscila en función del consumo de cada hogar y en algunas ciudades se cobra también por el alquiler del contador, aunque supera el euro.

El estudio realizado por Facua pretende poner de relieve la necesidad, en su opinión, de una normativa que regule el procedimiento para la aprobación de las tarifas, las indemnizaciones por cortes de suministro que no se deban a causas de fuerza mayor y la periodicidad de la lectura de contadores y emisión de facturas. Asimismo, Facua sostiene que se debe regular también la calidad del servicio (caudal y presión), los procedimientos para dar de baja el servicio y los sistemas de resolución de reclamaciones de los usuarios.

En general, la organización de consumidores entiende que es necesaria una normativa nacional que regule los derechos de los usuarios, pues es el único suministro doméstico que carece de ella. La facturación al cliente se hace mensual, bimestral o trimestralmente, en función de cada municipio.