Tal y como recoge el ‘Protocolo de exportación de melocotón y ciruela a China’, tras el veto ruso a algunos productos agrarios europeos, las negociaciones entre España y el país asiático se aceleraron. Desde 2014, la Federación Rusa decretó el embargo de determinados productos procedentes de la Unión Europea como represalia por las sanciones económicas y financieras que le fueron impuestas cuando tuvo lugar la conocida como ‘crisis de Ucrania’. Como reacción a este bloqueo, las administraciones -tanto comunitaria como española- y el propio sector intensificaron sus esfuerzos para la diversificación de las exportaciones y la apertura de nuevos mercados. Fue en este marco, en el que hubo mayor acercamiento de posturas entre las autoridades españolas y chinas. De este modo, España se convirtió el pasado verano en el primer país europeo autorizado a exportar fruta de hueso a China. Y Extremadura fue la gran beneficiado porque aquí se encuentra el 90% del cultivo nacional.