La necesidad de intervenir de forma multidisciplinar para que la discapacidad se retrase en las personas mayores, introducir contenidos en las especialidades médicas de Enfermería una vez finalizados los estudios de grado o mejorar la atención integral a la tercera edad, son algunas de las conclusiones del III Simposio Internacional de Educación Geriátrica, que finalizó ayer en la sede de la Fundación Académica Europea de Yuste, y en el que han participado especialistas de Canadá, Israel, Eslovaquia, Chile, Argentina, Reino Unido y España, entre otros países.

Por otra parte, el simposio ha desarrollado un curriculo básico de conocimientos, aptitudes y habilidades clínicas en medicina geriátrica, además de tratar de definir las bases para el desarrollo de servicios de atención médica geriátrica y orientar la formación continuada como herramienta para mantener la cualificación de los geriatras y su conocimiento de los avances científicos. En este sentido el director del simposio, Juan Florencio Macías, se inclinó "por la homologación de los estudios en todos los países".

Por lo que respecta al encuentro de mayo del 2004, Macías, señaló que "ahora hemos añadido pequeños detalles, haciendo hincapié en las correlaciones de la genética con las manifestaciones clínicas, que son muy importantes en geriatría", y la conveniencia de potenciar las actitudes positivas hacia el anciano.

Por otra parte el doctor canadiense, Christopher Patterson, enfatizó en la rentabilidad que supone la atención geriátrica comparada con la que se presta en los hospitales generales, "siempre que haya una geriatría integral", compuesta por una unidad de agudos, otra de media estancia, ayuda a domicilio y hospitales de larga estancia.

Por último el director de la Fundación Academia Europea de Yuste, Antonio Ventura Díaz, adelantó que las conclusiones se remitirán a todos los organismos internacionales.