El presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella, consideró ayer que la prohibición de las posiciones en corto con acciones de Liberbank «dio resultado» porque tranquilizó un mercado «nervioso» por la caída del Banco Popular. Albella pidió «no adelantar acontecimientos» sobre la posibilidad de prorrogar esa medida adoptada durante un mes el pasado 12 de junio, con el propósito de evitar la especulación a la baja de los valores de Liberbank.

El presidente de la CNMV aseguró que ese organismo de control quiere contribuir a «la tranquilidad y normalización» del mercado, aunque «lo normal es que los valores se negocien libremente». En un almuerzo con empresarios asturianos organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), Albella puntualizó las diferencias entre Liberbank y el Banco Popular, que finalmente fue adquirido por el precio simbólico de un euro por el Santander.La situaciones de ambas entidades son distintas porque en el caso de Liberbank las razones eran «exógenas». La caída del Popular «se vivió con dramatismo» en la CNMV pero «se decidió no intervenir» porque una medida «temporal» como la que se adoptó luego con Liberbank no hubiera dado resultado.