La proliferación de bazares --mayoritariamente regentados por asiáticos-- ha disparado las importaciones extremeñas de productos chinos. Según un informe de Quota Research, elaborado por encargo del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, en España hay ya más de 16.600 bazares y tiendas de conveniencia, de los que 495 (un 3%) están en Extremadura. Esto coloca a la región como la séptima del país en número de establecimientos de este tipo, con uno por cada 2.000 habitantes.

El estudio indica que estos negocios son una evolución de las tiendas de todo a cien , pero con una política más agresiva en cuanto a variedad de artículos y precios bajos. Asimismo, se aprecia que más de la mitad de los establecimientos tienen menos de cinco años, lo que revelaría una creciente implantación en el último lustro. En cuanto a sus características, la mayor parte ocupa entre 50 y 150 metros cuadrados, los locales son explotados en régimen de alquiler, abren más de diez horas al día y la mitad de las personas que trabajan en ellos son extranjeros, sobre todo de origen chino.

Según el estudio, la irrupción de estos negocios, que explotan como ventaja la amplitud de horarios e introducen nuevos hábitos de consumo y demanda, ha provocado un cambio radical en el comercio minorista. Sin embargo, se añade que el factor principal de su éxito radica "en que no tienen costes laborales, porque en el negocio trabaja toda la familia y eso les da flexibilidad para poder hacer con el horario lo que quieran". Con estos elementos, concluye, se han convertido en una seria amenaza para el comercio tradicional.

IMPORTACIONES Otro factor de estos bazares es que suelen vender productos de los países de donde proceden sus dueños.

De esta manera, la proliferación de estos establecimientos ha traído un incremento paralelo de las importaciones de productos chinos. En los últimos cinco años, las compras extremeñas en China se han multiplicado por cuatro, pasando de poco más de cinco millones de euros en el 2000 a 19,4 millones de euros en el 2005, lo que ha llevado el desequilibrio de la balanza comercial extremeña con China hasta los 16 millones.

Entre los productos estrella de estos bazares, que son los que han experimentado un mayor auge en la importación figuran maletas (las compras a China pasaron de 45.000 euros a 1,5 millones), ropa (de medio millón a 2,1 millones), zapatos (de 30.000 euros a un millón) y flores artificiales (de medio millón a casi dos millones). Mientras, y aunque las apariencias dibujan lo contrario, la importación de juguetes ha descendido ligeramente hasta quedar en medio millón. Sin embargo, este fenómeno es atribuible, según el informe, a que cada vez más productos son comprados a China por mayoristas asiáticos ubicados en lugares como Madrid, Barcelona o Sevilla, que luego los distribuyen a bazares de todo el país.