El tren Badajoz-Madrid durará 3 horas y 35 minutos (hora y media menos de lo que tarda ahora), el Mérida-Madrid se completará en 3 horas y 15 minutos (un ahorro de una hora y 10 minutos) y el Cáceres-Madrid se recorrerá en 2 horas y 40 minutos (45 minutos menos que actualmente). Parece una utopía, pero es lo que durarán los trayectos cuando, por fin, se cumplan los compromisos adquiridos por el Gobierno central con Extremadura. Aunque el exministro de Fomento, Íñigo de la Serna, prometiera que toda la obra de la línea Badajoz-Plasencia estaría lista en el verano de 2019, lo que se mantiene es que finalizarán a finales del año que viene. Y a partir de ahí la duración de los viajes tendrá las citadas mejoras, que serán aún mayor cuando en 2020 llegue la electrificación (cuyo plazo también se mantiene).

Desde Adif informaron ayer que solo faltaba por licitarse la obra de montaje de vía entre Plasencia y Cáceres, y se hizo el pasado 16 de julio. De esta manera, «el porcentaje de ejecución se encuentra en el 68%».

El secretario de Estado de Infraestructuras, Transportes y Vivienda, Pedro Saura, aseguró ayer tras la reunión del Pacto por el Ferrocarril en Mérida que hasta finales de 2019 se van a invertir unos 540 millones de euros en la alta velocidad extremeña.

La consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio de la Junta, Begoña García Bernal, le contestó que se deben acelerar los plazos porque «hay retrasos de meses». Y recordó que estarán vigilantes para que cumpla con lo acordado.

Ancho Ibérico

¿Cómo va a ser esa línea Badajoz-Plasencia? En una primera fase de explotación se montará la vía en ancho ibérico para que los trenes que viajen entre Extremadura y Madrid, que harán uso tanto del nuevo tramo Badajoz-Plasencia como de la línea convencional hasta la capital madrileña, puedan circular en todo el trayecto, evitando la necesidad de utilizar cambiadores. Después, cuando se haya completado la línea, se cambiará a ancho internacional y ya se podrá hablar de AVE (una operación sencilla desde el punto de vista técnico, se hace con una maquinaria especial que va estrechando la vía para adaptarla a la alta velocidad).

Tal y como explican desde Adif, el ancho de vía es «irrelevante» para que puedan prestarse servicios de alta velocidad: «Lo verdaderamente importante es que la infraestructura posea una serie de características técnicas como radios de curva muy amplios, pendientes reducidas o ausencia de pasos a nivel, además de los equipamientos necesarios de instalaciones de comunicaciones, seguridad y señalización, entre otras».

En cuanto a las nuevas estaciones, poco se sabe de ellas, los proyectos aún se encuentra en fase de redacción. «Para esta primera fase se utilizarán las actuales, que van a ser objeto de actuaciones de adaptación y modernización a los servicios de alta velocidad».

¿Y cuándo llegará el AVE? Se calcula que en 2025. Más allá de la capital del Jerte, hay dos tramos más: Plasencia-Talayuela y Talayuela-Madrid. «En el primero hay finalizado un tramo de plataforma y otro en estado muy avanzado de ejecución. A estos se sumarán otros cinco cuyos proyectos se encuentran en fase de redacción, siendo tres de ellos adaptaciones a la normativa vigente», explican desde Adif. La inversión es de 855 millones y se espera que todo el recorrido esté finalizado en 2023.

En cuanto al Talayuela-Madrid, se contempla un nuevo trazado que parte de la línea de alta velocidad Madrid-Toledo, pasando por Talavera de la Reina. «Actualmente se encuentra en fase de redacción el estudio informativo por el Ministerio de Fomento». La inversión prevista global es de 1.120 millones de euros.

«Ese nuevo estudio informativo analizará la conexión de la plataforma con Toledo. El cálculo es que esté redactado a finales de este 2018 y a partir de ahí saber si esa conexión es viable o no», indicaron desde Adif.