La Asamblea de Extremadura no investigará la adjudicación por parte de la Junta del servicio de gas canalizado en doce localidades de la región a la empresa Dicogexsa. El PSOE rechazó ayer con sus votos la creación de una comisión de investigación al respecto, tras la sentencia firme del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) que anula esta adjudicación --por considerar que ha habido irregularidades--, mientras el PP cree que el Ejecutivo regional ha cometido "desviación de poder".

El asunto mereció la intervención del presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y el líder del PP extremeño, Carlos Floriano, que se enzarzaron en un debate caliente , en el que incluso el jefe del Ejecutivo autonómico instó al PP a presentar una moción de censura si considera que ha habido un "pelotazo" y que la adjudicación se amañó en una comida con empresarios, argumentos esgrimidos por los populares.

El debate fue subiendo de tono con las acusaciones de irregularidad por una y otra parte. Así, mientras Rodríguez Ibarra juró por su "honor" que en su vida ha "arreglado un negocio con nadie", Floriano aprovechó este juramento para decirle que "ni siquiera defiende el honor de la Junta", sino el suyo, y que no entra a valorar una sentencia, impidiendo una comisión de investigación "porque no quieren --en referencia a la Junta-- estar dos meses con este asunto".

El presidente del Gobierno regional insistió en que el PP lo único que persigue desde hace tiempo es "sentarme en el banquillo y verme en la prisión de Badajoz o en la de Cáceres", porque "tienen mala escuela, de mala sangre, de mala gente, del señor Aznar". El presidente popular pidió, sin éxito, que retirara estas palabras y acusó a Ibarra de dar "una pésima imagen de Extremadura", mientras la diputada popular Cristina Teniente argumentó que con el rechazo a investigar "se ampara la corrupción". José Antonio Jiménez, de IU-Siex, dijo que hay elementos de responsabilidad política que justifican la comisión.