Los comités provinciales de Cáceres y Badajoz aprobaron ayer las listas que el PSOE presentará en las dos provincias extremeñas a las elecciones generales del 14-M, que reflejan una renovación cercana al 60% sobre su representación actual en ambas cámaras. El objetivo, según explicó el secretario provincial pacense, Francisco Fuentes, de recuperar la primacía perdida en la convocatoria del 2000.

Las candidaturas presentan pocas novedades en lo que al Congreso se refiere, donde, en los puestos de salir , según la previsión de Fuentes, se mantiene a Victorino Mayoral como cabeza de lista por Cáceres, al que acompañaría Manuela Holgado (Cáceres elige en esta ocasión sólo cuatro diputados, al perder uno por población). Mientras, en Badajoz cae Francisco Amarillo y su lugar lo ocupa José Luis Galache. En los puestos siguientes se mantienen Francisco Fernández Marugán y María Soledad Pérez.

Respecto al Senado, los socialistas esperan un vuelco, para pasar de los dos representantes actuales (uno por provincia) a seis. Aquí la renovación ha sido más completa, y los elegibles son Juan Antonio Alvarez, Javier Corominas y Rafaela Fuentes, por Cáceres, y Eugenio Alvarez, Eduardo de Orduña y Carmen Granados, por Badajoz.

Respecto a la exclusión de Carlos Sánchez Polo, propuesto por la agrupación local de Cáceres para el Congreso, el secretario provincial cacereño, Juan Ramón Ferreira, señaló que el exvicepresidente de la Junta "ha dicho que no tenía ninguna apetencia por entrar en la política nacional". Sin embargo, fuentes socialistas indicaron que ésta y otras decisiones provocaron que en la ejecutiva provincial cacereña hubiese cinco votos en contra y tres en blanco, sobre el total de los 28 emitidos.

Este malestar se trasladó al comité de ayer, donde de los 80 delegados, 26 no apoyaron la candidatura propuesta, lo que supone más de un 30% de rechazo.