La calidad seminal está condicionada por numerosos factores, algunos conocidos y otros difíciles de detectar. La dieta, el ejercicio físico, el alcohol y el tabaco influyen decisivamente tanto en la concentración como en la movilidad de los espermatozoides, así como también lo hace los tratamientos médicos y los productos químicos. Según la autora de la tesis, Graciela Lozano, "es conocido que hay ciertas profesiones que facilitan el empeoramiento de la calidad del semen. El trabajo de pintor, minero o camionero incluso, por estar muchas horas sentado y a altas temperaturas, pueden implicar una merma de la calidad seminal, pero no siempre, porque también entra en juego la capacidad del individuo para revertir el proceso".

Por su parte, el director del Centro Extremeño de Reproducción Humana Asistida, Francisco García Malpartida, valoró ayer satisfactoriamente el trabajo "muy avanzado" de Lozano, que dice es ejemplo del nivel que está adquiriendo la región como referencia nacional en la corta historia del centro, que lleva en marcha desde el 2005. "Hemos sido casi los últimos en abrir como modelo público, hemos aprendido de los demás y eso mejora nuestro rendimiento".