Los 60 millones de euros asignados a la Consejería de Sanidad en el crédito extraordinario se destinarán, al margen del nuevo hospital de Cáceres, a equipamientos sanitarios como las nuevas unidades de radiodiagnóstico para 40 centros de salud, de manera que "ningún ciudadano tenga que desplazarse más de 30 kilómetros para hacerse una radiografía", según explicó el consejero Guillermo Fernández Vara.

Además, la telemedicina se incorporará a los ochos hospitales regionales, que estarán conectados con los veinte centros de salud de las cabeceras de comarca para facilitar las consultas de especialidades "y que no viaje ni el paciente ni el médico".

Por otro lado, todas las áreas de salud contarán con unidades de diálisis, recortando las distancias que tienen que recorrer los enfermos, y también se crearán unidades de oncología en las ocho áreas sanitarias.

Respecto a los métodos avanzados de diagnóstico, el número de resonancias magnéticas pasará de uno a cinco, instalándose en los hospitales de Cáceres, Plasencia, Mérida y Don Benito. Del mismo modo, se comprarán tres nuevos TAC y los hospitales de Mérida y Cáceres contarán con unidades de hemodinámica para cardiología no intervencionista.

El consejero apuntó que con estos proyectos se adelantarán los objetivos marcados en el proyecto sanitario regional.

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