El representante legal de los antiguos propietarios de los terrenos sobre los que se asienta Siderúrgica Balboa, Juan de Dios Rodríguez Pina, dejó claro ayer que "en ningún caso" los afectados aceptarán una simple permuta de terrenos como ejecución del auto judicial que obliga a la Junta a que les devuelva los terrenos donde está la empresa.

En este sentido, Rodríguez Pina recordó que el auto del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) establece la reversión de los terrenos, un proceso cuyo primer paso sólo puede ser la valoración de los terrenos --a precio agrícola--, por parte de la Junta, para que los antiguos propietarios puedan adquirirlos. "No hay otra posibilidad", insistió, rechazando así lo dicho la semana pasada por el vicepresidente extremeño, Ignacio Sánchez Amor, quien apuntó que la solución judicial podría pasar por una compensación a través de otras tierras.

"NO HAY TIEMPO" Rodríguez Pina insistió en que "ya no hay tiempo para eso" una vez "que los tribunales ya han terminado su trabajo y dicen que nos tienen que devolver esos terrenos y no otros".

A su juicio, el problema es que ni la Junta ni la empresa asumen aún quién debe cumplir la sentencia, puesto que se puso en contacto recientemente con dirigentes de Siderúrgica Balboa "y dicen que es la Junta la que tiene que hacerse cargo".

Pese a todo, los afectados --propietarios a los que se expropió terreno para uso agrícola y posteriormente se cambió a uso industrial para permitir la apertura de Siderúrgica Balboa-- siguen dispuestos a negociar. Según sus primeras estimaciones, el Grupo Gallardo --"que está de forma ilegal en unos terrenos que no son suyos"-- debería pagarles unos seis millones de euros más los intereses generados desde que se inició el proceso, hace once años. "Hemos tenido mucha paciencia", añadió el representante de los afectados, "y ya no vamos a dudar en seguir adelante hasta el final".