El primer objetivo del Pacto de Estado por la Sanidad "debe ser garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS) durante los próximos años". Así lo defendió ayer en el Congreso de los Diputados la comunidad extremeña a través de su director general de Planificación, Ordenación y Coordinación de la Consejería de Sanidad y Dependencia, José Luis Ferrer.

Ferrer, que compareció en el Congreso en el seno de la subcomisión para dicho pacto de la Sanidad, apuntó que ha de ser "una sostenibilidad que comprende conservarlo y mejorarlo, garantizando la cohesión, la equidad en el acceso, la calidad, la eficiencia y la innovación del mismo, a través de una financiación suficiente, solidaria y sostenible".

Asimismo, el director general, que según informó ayer la Junta en nota de prensa compareció en el Congreso para realizar un análisis, reflexión y propuestas que puedan contribuir a facilitar los trabajos de dicha subcomisión, desgranó ante los diputados un conjunto de condiciones que debería cumplir el pacto. Entre otras, el "respeto a los cambios de competencias" del Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas, "que sea fruto de un proceso de diálogo y consenso" y que nazca y se lleve a cabo "sobre la base de la lealtad institucional".

Señaló también que deberá permitir el liderazgo del Ministerio de Sanidad en las políticas esenciales para el SNS, que se adapte al modelo social actual, que asegure la atención sanitaria de los profesionales sanitarios, y que incluya el diálogo social con las organizaciones del sector y la participación activa de los ciudadanos.

OTRAS PROPUESTAS Por otra parte, el representante de la Consejería de Sanidad extremeña destacó "los problemas de cohesión y gobernabilidad" del SNS, y propuso algunas iniciativas para darles solución, como "la colaboración generosa de todas las administraciones competentes en sanidad para articular políticas de cohesión y labores de coordinación entre los distintos servicios y territorios actualmente descentralizados".

Manifestó asimismo Ferrer la necesidad de reorientar el sistema hacia la Salud Pública, para lo que consideró "sería necesario contar con una Ley de Salud Pública del SNS y fortalecer los sistemas de información para permitir la comunicación recíproca entre administraciones y comunidades autónomas". Y destacó la importancia de contar con una cartera de servicios común, "como elemento clave de cohesión del SNS, así como la necesidad de "dar continuidad al procedimiento actual de designación de centros, servicios y unidades de referencia para el conjunto del SNS, velando por favorecer la accesibilidad territorial".