Administraciones y promotores deben demostrar su apuesta por la vivienda protegida e incrementar su actividad en este campo para hacer frente a la demanda para los próximos años. Las dificultades económicas, sus precios más bajos y el parón de las promociones libres originarán un incremento de la demanda de este tipo de pisos para los próximos años, según la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Este organismo calcula que entre el 2009 y el 2012 los extremeños demandarán más de 10.000 viviendas protegidas. Actualmente apenas se terminan unas 2.000 al año y el ritmo de iniciación de nuevos proyectos es muy inferior --unas 1.000--.

La demanda de viviendas sociales se ha disparado. O eso es al menos lo que muestran las cifras estadísticas. De acuerdo con los datos del Ministerio de la Vivienda, las ventas de pisos protegidos o acogidos a planes especiales de las Administraciones se han triplicado en apenas tres años. En el 2004, 2005 y 2006 las transacciones de este tipo de casas, en estado nuevo, apenas superaba el millar anual; durante el 2007 se vendieron 2.225; y los números provisionales hasta septiembre indican que, a falta de un trimestre, ya se ha sobrepasado ese umbral: 2.272; si entre octubre y diciembre el mercado se ha comportado igual, el 2008 se cerró con unas 3.000 vivienda protegidas nuevas vendidas.

Ante este incremento de la demanda, la ministra del ramo, Beatriz Corredor, ha instado al sector de la construcción a reorientar su actividad hacia las promociones sociales debido a la caída que sigue experimentando el mercado de vivienda libre.

SIN INDICIOS CLAROS De momento el sector, en Extremadura, no muestra indicios claros sobre qué tendencia pretende seguir respecto a esta propuesta. Mientras a escala nacional uno de cada cuatro proyectos de vivienda que se iniciaron durante el tercer trimestre del año fueron de VPO, en Extremadura apenas supusieron el 5% de las obras empezadas. Y si se echa la vista atrás para observar la evolución durante la última década, la perspectiva no mejora: de los 2.181 pisos y casas protegidas que se comenzaron a levantar en la región durante el 2003, se pasó a las 870 del 2006 y al ligero repunte del 2007 --se llegó 1.246--; sin embargo, entre enero y septiembre del 2008 se han iniciado poco más de 400. Lejos quedan ahora los tiempos --finales de la década de los noventa-- en la que se superaban las 3.000 VPO´s comenzadas por año.

Igualmente, la finalización de obra no ofrece muestras de confianza. Mientras que en el 2007 se registró una subida de las viviendas concluidas --2.489, frente a una media de 1.700 en los tres años anteriores--, entre enero y septiembre del 2008 se han finiquitado 1.679. Es decir, en estos tres últimos meses del 2008 deberían haberse finalizado otras 800 para alcanzar registros similares a los del 2007.

En este sentido, si se cruzan todos los datos del ministerio --en cuyas estadísticas se tienen en cuenta planes especiales de cada comunidad, como el Plan 60.000 , que no es de viviendas protegidas sino de pisos a precios bajos-- con las previsiones de la FEMP, la conclusión es que la región no podrá cubrir toda la demanda de este tipo de construcciones.

Una demanda que viene marcada por el alto precio del mercado de la vivienda libre y las ventajas, en este sentido, de la vivienda protegida. Aunque si se mira la evolución, este tipo de construcciones se han encarecido un 20% en los últimos tres años --de los 766 euros por metro cuadrado de septiembre del 2005, a los 914 del 2008--.