Extremadura planteará ante la Unión Europea que la sequía puede ser susceptible de percibir ayudas del Fondo de Solidaridad. La propuesta fue planteada ayer en Olivenza aprovechando la visita de un grupo de trabajo del Consejo Económico y Social (CES) europeo para conocer los efectos de la falta de agua en la Península Ibérica.

Para el acceso a estas ayudas, Bruselas establece que la catástrofe incida sobre el Producto Interior Bruto (PIB) de la zona afectada. La UE mide un umbral mínimo para que pueda intervenir el fondo en un descenso de 0,6 puntos del PIB.

Representantes de organizaciones profesionales agrarias, la Confederación de Empresarios de Badajoz (Coeba), la Consejería de Agricultura y de los sindicatos de la región, plantearon ante el CES la consideración de la sequía como un problema similar a una "catástrofe natural". A pesar de ello, este órgano sólo tiene carácter consultivo y aunque su informe pudiera resultar favorable, la decisión final de la concesión de estos fondos pasa por el Europarlamento y la propia Comisión Europea.

Para el secretario general de UPA-UCE Extremadura, Ignacio Huertas, la falta de agua reúne todos los requisitos para ser considerada catástrofe, ya que sus efectos van más allá del tema agrario, impactando también en parte de la sociedad. Huertas insistió en que la sequía que este año está azotando el país produce pérdidas no solo económicas, pudiéndose estar hablando de pérdidas de hasta 400 millones de euros, sino también en el empleo y en la producción de las agroindustrias.

EL FONDO SOLIDARIO El líder agrario recordó que el Fondo de Solidaridad nació en el año 2000 por los problemas de inundaciones que padecieron Alemania y Francia y en este sentido, Huertas insistió en que con la sequía estamos hablando de otro "problema catastrófico más".

Por su parte, el secretario general del sindicato UGT-Extremadura, Miguel Bernal, insistió en la necesidad de incluir las catástrofes vinculadas a las cuestiones climáticas como susceptibles de recibir partidas de este fondo. Según el dirigente sindical, después de esta reunión de trabajo, el CES europeo, que ayer estuvo de visita en Portugal, tiene "muy claro" cuál es el problema de la sequía en ambos países y ha sacado "una idea clara y altísimamente positiva", comparando los casos de Portugal y España.

El dirigente sindical añadió que el país vecino "no ha sabido diferenciar entre los elementos estructurales y los coyunturales", aludiendo al hecho de que Portugal tiene un "grave problema estructural" y lo que viene a hacer la sequía, "no es otra cosa que agravar este problema".

EL PROBLEMA LUSO De Portugal destacó la carencia de infraestructura de almacenamiento de agua, caso que es diferente en España en donde "los deberes están hechos" y en donde en los últimos veinte años se puso en marcha toda una infraestructura de preservación y ahorro de agua, "aunque a pesar de ello estamos atravesando por un fenómeno coyuntural que es el nos coloca en una situación muy complicada".

Bernal no cuantificó las pérdidas de puestos de trabajo que la sequía puede producir pero avanzó que esta situación podría influir en el descenso del producto interior bruto de Extremadura alrededor de 2 puntos.

Los representantes de las organizaciones profesionales agrarias de la región, de la consejería de Agricultura, de los sindicatos y patronales, que han participado en esta reunión de trabajo, intentarán a lo largo de la próxima semana redactar un documento conjunto para elevarlo al ponente del Fondo Económico Social Europeo para su traslado tanto a la Comisión Europea como al Parlamento, para incidir en que la sequía sea incluida como perceptora del fondo.